El Banco de Tiempo Solidario de la Universidad de Navarra TANTAKA celebra el Día Internacional de Voluntariado con 166 proyectos realizados con fines sociales
Compromiso con un mundo mejor
“Quienes primero actúan en momentos de crisis, crean vínculos sociales y dan voz a los grupos marginados y vulnerables”
Una fecha conmemora el valor del tiempo humano que cambia el mundo a mejor: el 5 de diciembre, reconocido como Día Internacional del Voluntariado. Fue en 1985 cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas dedicó esta jornada a todos aquellos que ofrecen su tiempo, trabajo y formación profesional a los necesitados en diferentes rincones del mundo. La ONU calificó dicha iniciativa como “una celebración de nuestro compromiso y de nuestra esperanza de un mundo mejor”, por el que luchan alrededor de 1.000 millones de voluntarios en diferentes países. En 2018, el secretario general de la ONU, António Guterres, destacó la enorme fuerza y valoró la aportación de los voluntarios: “Quienes primero actúan en momentos de crisis, crean vínculos sociales y dan voz a los grupos marginados y vulnerables”.
Del campus a la ciudad
Compromiso
Más sobre Tantaka
Hablar de voluntariado es hablar de Tantaka
Pone “gota a gota” el tiempo y el talento de los alumnos, profesores y otros profesionales de la Universidad
En Pamplona, San Sebastián, Madrid… en la Universidad de Navarra hablar de voluntariado es hablar de Tantaka, que pone, desde el año 2012, “gota a gota” el tiempo y el talento de los alumnos, profesores y otros profesionales de la Universidad al servicio de la sociedad. 1.387 voluntarios volcados en 166 proyectos, en colaboración con 138 entidades y colectivos sociales de las distintas ciudades.
Al servicio de la ciudad
Un voluntariado que pretende conseguir una sociedad más justa, igualitaria e inclusiva
Ayudar a un niño con sus tareas en el colegio público Ermitagaña o montar partidos de baloncesto en el barrio de San Jorge; acompañar a las personas mayores en la lectura de un libro en la residencia Amavir Oblatas de la Rochapea; impartir talleres de robótica a niños con autismo en la asociación Gautena en San Sebastián o montar una pequeña biblioteca solidaria para 150 niños que atiende la parroquia del barrio de Canillejas en Madrid. Son solo algunos ejemplos de cómo la ciudad abre sus puertas al voluntariado de Tantaka. Un voluntariado que pretende conseguir una sociedad más justa, igualitaria e inclusiva.
TEC
NUN
Una hora regalada a una persona con necesidad puede transformar el mundo
52.207 horas han destinado los voluntarios de Tantaka en el último año a los demás. Pero, ¿cuál es el valor del tiempo? Una hora regalada a una persona con necesidad puede transformar el mundo. Puede convertir un lugar hostil en un espacio social de esperanza que encienda sonrisas en los rostros más marcados por el sufrimiento. Porque, como dijo el Nobel de la Paz, Desmond Tutu, “toda nuestra humanidad depende de reconocer nuestra humanidad en los demás”.