No hace falta mirar muy lejos hacia el futuro para visualizar un mundo interconectado. De las redes fijas hemos pasado al dominio de la movilidad. Del predominio de la voz hemos alcanzado un mundo de conexiones a través de internet. Y el próximo paso ya emergiendo será lo que vulgarmente llamamos el Internet de las Cosas, un mundo lleno de sensores en los lugares más remotos e inesperados, interconectados, con inteligencia distribuida, tomando multitud de decisiones que nos afectarán en nuestra vida diaria. Y este mundo ya está aquí.

Visualicemos, pues, este mundo lleno de sensores, muchos activos, muchos interconectados, pero todos electrónicos. Algunos de estos sensores se parecerán a los que ya observamos si miramos con cuidado y nos indican presencia, utilización, necesidad de actuación¿ Pero cada vez necesitaremos sensores, o mejor algún tipo de inteligencia, algún tipo de electrónica, sobre superficies flexibles, quizás textiles, o incluso sobre el propio cuerpo. Y ahí entra en juego una tecnología emergente cuyo límite es totalmente inimaginable, la electrónica impresa o printed electronics en nuestro mundo global.

El pasado 7 de junio se presentó en la sede del Iese de Barcelona el informe Printed electronics and emerging macrotrends que ha preparado Cetemmsa. Podemos abrir al azar alguna de las páginas del documento para entender algunas aplicaciones de esta tecnología que se vislumbran en un futuro cercano y no tan cercano. Por ejemplo, podemos imaginar que en la década del 2020 al 2030 tengamos montones de biosensores que incluso puedan reflejar nuestras emociones, podamos completar nuestro confort en un spa con accesorios electrotérmicos o con electromasajes, todo adaptado a nuestra propia idiosincrasia.

IMAGINACIÓN AL PODER
Podemos imaginar también con luminiscencia o calefacción incorporada en multitud de elementos constructivos o bien decorativos, o elementos que mejoren nuestro confort en el automóvil.

Las posibilidades de aplicativos médicos, de sensores sobre el cuerpo, mejoras ergonómicas o farmacéuticas, potenciación del e-health... La imaginación no tiene límites en este campo.
Más próximos en la década actual vemos posibles aplicaciones en el mundo textil, en juegos, en juguetes, en ciudades inteligentes... y todas estas aplicaciones son ya posibles, están a la vuelta de la esquina para crear para todos nosotros un futuro más confortable, un futuro más seguro, un futuro más inteligente. Todo esto y más es ya una realidad gracias al esfuerzo investigador y de desarrollo tecnológico llevado a cabo yen marcha en este momento en Cetemmsa.

Pero el futuro se hace andando. La tecnología está ya presente, algunos elementos más avanzados, otros en fases más incipientes pero preparados para ayudar a nuestro tejido industrial a crear el futuro que hemos descrito. Ahora se necesita imaginación para desarrollar aplicaciones novedosas, se necesita emprendimiento para diseñar el modelo de negocio adecuado para explotar estas oportunidades, se necesita colaboración entre el centro tecnológico y las empresas y emprendedores de nuestro país y del mundo para hacer de este futuro una realidad. Cetemmsa se presta en este entorno a transmitir la tecnología, a trabajar en los prototipos, a desarrollar el modelo de negocio, en definitiva, innovar con productos diferenciables y de gran valor añadido.

Cetemmsa es un centro tecnológico especializado en electrónica impresa, flexible y plana, alternativa a la electrónica del silicio tradicional, que permite por tanto nuevas funcionalidades en distintos tipos de superficies, sean textiles, plástico, papel...

Cetemmsa ha puesto en marcha un ambicioso plan estratégico orientado a la colaboración con empresas y organizaciones en todo el mundo, con la ambición de alcanzar altas cotas de excelencia internacional en su campo de especialidad; todos los que participamos de alguna manera en Cetemmsa compartimos esta ambición e instamos a las empresas más visionarias e innovadoras a acompañarnos en este camino. El futuro ya espera en nuestra puerta. ¿Quieres entrar? Te esperamos.