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El Estrecho de Taiwán, entre la costa del sureste de China y Taiwán [NASA]
[Versión en inglés]
“Noticia de última hora: Estados Unidos, Taiwán y Japón derrotan una invasión anfibia convencional de China y preservan la autonomía de Taiwán. Sin embargo, la defensa ha tenido un alto costo. Estados Unidos y sus aliados han perdido decenas de barcos, cientos de aviones y decenas de miles de militares. Taiwán ha visto su economía devastada. Además, las altas pérdidas van a dañar la posición global de EEUU durante muchos años”.
¿Suena realista? Aunque es solo un escenario ficticio, esto es lo que probablemente sucedería si hoy China finalmente decidiera lanzar una invasión anfibia sobre su vecina isla del sureste. Esa es la principal conclusión de 'La Primera Batalla de la Próxima Guerra', el nuevo juego de guerra desarrollado por el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS) de Washington para probar todos los escenarios plausibles en caso de que estalle un conflicto en la isla de Taiwán y sus alrededores.
La República Popular China ve a Taiwán como una posesión legítima que le pertenece, así como un activo de enorme valor estratégico para expandir su control sobre el Mar de China Meridional y su entorno. El gobierno de Xi Jinping considera que esa región son aguas territoriales chinas y ha estado llevando a cabo una seria modernización de sus capacidades y tecnologías navales en los últimos años, transformando una armada de básicamente fuerzas de patrulla costera en una flota relevante. Solo en 2022, los astilleros chinos lanzaron su tercer portaaviones (CV-18 'Fujian'), un portaaviones de asalto anfibio Tipo 075, tres unidades de su gran destructor Tipo 055 y varias fragatas polivalentes Tipo 054A; además, cinco destructores Tipo 052D están casi terminados en los astilleros de Dalian.
Por lo tanto, ante informes recientes que consideran muy probable que se produzca una invasión antes del final de la década, el juego de guerra ofrece una visión profunda de cómo se llevaría a cabo. La información utilizada para el desarrollo y la conducción del ejercicio fue extraída de numerosas evaluaciones no clasificadas, incluida la del analista militar Michael O´Hanlon y la de Bradley Martin de RAND Corporation. A través de los análisis públicos y la información disponible, los juegos de guerra son una herramienta muy útil para los encargados de formular políticas y para las instituciones de investigación que buscan comprender las fuerzas implicadas, y así luego poder predecir cómo podría desarrollarse esa situación futura.