20030905"En el futuro desarrollaremos sistemas para inducir cambios en las células sin manipularlas fuera del cuerpo"
"En el futuro desarrollaremos sistemas para inducir cambios en las células sin manipularlas fuera del cuerpo"
El Dr. Felipe Prósper, de la Universidad, es partidario de "no transmitir esperanzas exageradas por el bien de los enfermos"
"Probablemente dentro de unos años, gracias a los estudios realizados con células madre adultas, habremos empezado a comprender un poco mejor las señales que las hacen crecer y diferenciarse. También habremos desarrollado sistemas para poder inducir dichos cambios en las propias células del paciente sin necesidad de manipularlas fuera del cuerpo". Así lo afirmó en la Universidad de Navarra el Dr. Felipe Prósper. Este especialista habló sobre "Células madre e ingeniería celular" durante el curso de verano "Los retos de la investigación biomédica en el siglo XXI. Biomecánica, bioinformática y bioingeniería".
Según explicó, ya "existen numerosos avances en el campo experimental en relación con la biología básica de las células madre adultas, pero no en el plano clínico". También dijo que, "a pesar de los indudables progresos y las perspectivas existentes, estamos lejos de que el tratamiento con células madre adultas sea una realidad en la práctica clínica". Y reiteró que "es fundamental no transmitir esperanzas exageradas por el bien de los enfermos". Por eso, "es imprescindible continuar trabajando en este campo, ya que sin duda dicha investigación contribuirá al desarrollo de nuevos tratamientos de enfermedades devastadoras".
Posibilidades en párkinson, diabetes o cáncer
Felipe Prósper, del departamento de Hematología del Área de Terapia Celular de la Clínica Universitaria de Navarra, subrayó las enormes posibilidades de las células madre adultas. "Se podrían distinguir dos tipos de aplicaciones. En primer lugar, en la reparación de tejidos, es decir, la terapia celular regenerativa. Sería el caso del párkinson, la diabetes, los infartos y otras muchas enfermedades". En este tipo de patologías, "cuanto más complejo es el tejido que se ha de sustituir, mayor es la dificultad, ya que no es lo mismo sustituir un tipo de células que un órgano completo formado por distintos tipos celulares", indicó.
Y en segundo lugar, "como vehículo de la terapia génica. Esto consiste en ubicar el gen defectuoso en las células madre adultas y, posteriormente, poner las células en el paciente. Sería el caso de enfermedades como la hemofilia o todas aquellas en las que la causa de la enfermedad sea la ausencia de un gen". Felipe Prósper destacó asimismo que "las células madre adultas podrían ser utilizadas también en el tratamiento del cáncer, aunque aquí las estrategias son más complejas".
Con motivo del curso de la Universidad de Navarra, patrocinado por el Gobierno foral, el Ayuntamiento de Pamplona y Caja Navarra, el experto habló de las investigaciones en la Clínica Universitaria: "Nuestras líneas de investigación se centran en la utilización de células madre adultas en enfermedades cardiacas, en el párkinson, en patología ocular corneal y en cáncer. En todas ellas se trabaja desde el laboratorio, con modelos animales, hasta la aplicación clínica".