"Si durante una semana se elimina Internet en toda España, de manera que nadie puede conectarse, no sucede absolutamente nada. Y sin embargo, si se hace eso mismo con las líneas telefónicas, el país queda paralizado por completo y se provoca un colapso. Dentro de 10 años, nos parecerá ridículo pensar que no sucede nada si nos quedamos sin Internet durante una semana". Son palabras de Wenceslao Casares, fundador del banco on line Patagon, que pronunció una conferencia organizada por la Facultad de Económicas de la Universidad de Navarra en la que analizó el "Presente y futuro de Internet". "Este es el mejor momento para ser optimista con la red y trabajar con proyectos en Internet", aseguró.

En referencia a la seguridad de los bancos en Internet, señaló que "todavía no conozco a una sola persona que haya tenido un problema financiero en Internet. En realidad hay muchas más probabilidades de que atraquen una sucursal de cualquier banco y eso no preocupa a nadie porque, en caso de que suceda, el problema lo tiene la institución, y no el cliente. Y eso mismo se aplica a Internet".

Wenceslao Casares explicó, a propósito del futuro de Internet, que no hay que mirar únicamente la "fotografía" de lo que sucede ahora, sino tratar de entender la "película" de la evolución, es decir, lo que ha ocurrido hasta ahora y lo que pasará en adelante. "Por lo general, sobreestimamos las posibilidades de la tecnología de aquí a dos años, y subestimamos lo que ocurrirá dentro de diez años", apuntó.

"La tecnología triunfa cuando se hace invisible"

El fundador de Patagon sostuvo que "ver la película no es responsabilidad del público general, sino de los proveedores. La tecnología triunfa cuando se hace invisible". En este sentido, precisó que "muchísima gente utiliza de forma habitual el teléfono móvil sin detenerse a pensar cómo funciona desde el punto de vista tecnológico".

En esa misma línea, continuó diciendo que, "sin embargo, si deseo información sobre las películas que se proyectan hoy en los cines de Pamplona he de tener acceso a la red, he de saber dónde buscar, esperar a que se cargue la página y saber cómo navegar por ella. Dentro de unos años, se habrá conseguido que toda esa información se obtenga al instante, por ejemplo, en el teléfono móvil". Y concluyó que "es la tecnología la que se tiene que adaptar a las personas y, si sucede al revés, significa que la tecnología ha fracasado".