Agustí de Uribe-Salazar, pionero de las Relaciones Públicas en España, ha compartido sus experiencias con los estudiantes del Máster en Comunicación Política y Corporativa (MCPC). Durante la sesión, ha profundizado en el significado del lobby en España, la actuación de los lobbistas y las diferentes formas de actuación que pueden seguir para influir en la toma de decisiones. De Uribe comenzó su carrera profesional como experto en RRPP en España hace cincuenta años; participa activamente desde 1972 en el fomento del asociacionismo como camino para prestigiar la práctica profesional de las relaciones públicas, y en la actualidad es miembro del consejo asesor de MCPC de la Universidad de Navarra.

"El lobby no es pecado", ha afirmado, Agustín de Uribe para centrar el debate. "A muchas personas le asusta la palabra lobby, pero existen otras muchas para definirlo: Public Affairs, Comunicación Política, Relaciones Institucionales, Asuntos Públicos, Relaciones Gubernamentales o parlamentarias... pero al final todo esto es lobby", ha aclarado De Uribe, quien también ha explicado a los alumnos que el lobby no es la compra de voluntades o la extorsión: "Eso es de sinvergüenzas; eso es corrupción, no lobby". El lobby es influencia, es la defensa legítima de los intereses de distintos grupos ante las instituciones públicas para promover decisiones favorables a los intereses de ese sector concreto de la sociedad, ha afirmado Agustí de Uribe. Para ello, ha aconsejado a los estudiantes humildad y, sobre todo, que fuesen capaces de pensar en los demás, "no solo en el cliente, sino en el cliente del cliente" para poder entender bien la situación. El éxito, según De Uribe, está en el rigor, el trabajo y el cuidado de los detalles, lo más importante de nuestra profesión.

De Uribe ha recordado las palabras del ex presidente americano Kennedy sobre el lobby, afirmando que la gran ventaja de los lobbistas es que le hacían entender un problema en solo diez minutos, mientras que sus colaboradores tardaban diez días. De Uribe garantiza que ahí está la clave: "en captar perfectamente la situación y transmitirla de forma concreta a todos aquellos que toman las decisiones".

"Hay que usar la slow-communication, es decir, pensar mucho más antes que actuar" ha aconsejado. La clave está en el análisis y la planificación estratégica, antes de la acción y la evaluación. "Primero usar la cabeza, para luego utilizar los brazos y actuar", ha señalado. De Uribe también se ha atrevido a hablar sobre el futuro y ha dado esperanzas a los alumnos. A este respecto ha afirmado que, con los buenos profesionales que hay en este momento, "sobre todo los de esta Universidad, es imposible que se muera la profesión".