La Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra celebró la clausura de curso con una conferencia de Barry Bergdoll, profesor de Historia del Arte Contemporáneo de la Universidad de Columbia.

Bergdoll, que fue durante 10 años conservador del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA), impartió una conferencia titulada “Paradojas de la exposición de la Arquitectura: desafíos y propuestas”.

En ella, comenzó a explicar, desde el punto de vista histórico, la problemática de la exhibición arquitectónica en museos, mencionando cómo teóricos y expertos la habían calificado de “imposible”. “Como historiador, me pregunto: si mostrar la arquitectura dentro de un museo es tan imposible, ¿cómo ha llegado a ser una cultura tan viva los últimos 200 años?”, prosiguió.

En este punto, hizo hincapié en distinguir la exhibición de artistas con la arquitectónica. “Un artista, a través de una pequeña explicación puede hacer entender su obra. Pero también el público puede hacer una lectura de esta sin necesidad de explicarle nada. Por otro lado, la arquitectura trata sobre experiencias, modela el entorno, el medioambiente… pero no se puede meter un edificio en un museo”.  Y añadió: “Aquí encontramos la ironía de la arquitectura: Vivimos con ella, modela nuestras vidas. Sin embargo, el público no entiende el arte más público de todos”.

Preguntado por su opinión sobre los retos de la arquitectura en el siglo XXI, Bergdoll distinguió los temas del cambio climático y las diferencias sociales como elementos clave en los que trabajar y mejorar. “La clave está en cómo hacer que la arquitectura sea un agente activo atendiendo a estas dos cuestiones, sin olvidar que es un arte, con un pasado repleto de creatividad”.  Además, añadió: “Venimos de un tiempo en el que se han creado proyectos extremadamente lujosos, que han hecho surgir la idea de que la arquitectura es un lujo. Esto es lo contrario a lo que necesitamos: la arquitectura es una necesidad”.

Por otro lado, desde su punto de vista como profesor, recalcó que es importante que los estudiantes “tengan pasión y se guíen por ella”. “Es realmente difícil ser estudiante viviendo en la época de crisis”, recalcó. “Algunos estudiantes entran en la dinámica de hacer cosas, para conseguir un trabajo. Creo que deberían resistir esa tentación”.

El experto señaló la “pasión” y el “compromiso” como la estrategia para conseguir un desarollo profesional. 

 

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