Investigadores del CIMA identifican nuevos mecanismos que eliminan células de cáncer de hígado
Podrían facilitar tratamientos más eficaces basados en un virus terapéutico
Un equipo de científicos del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra ha identificado nuevos mecanismos moleculares utilizados por un herpesvirus terapéutico para destruir células de cáncer de hígado. El trabajo, publicado en la revista Molecular & Cellular Proteomics, se engloba en un proyecto europeo en el que participan laboratorios de Alemania, Francia, Italia, Grecia y varias empresas biotecnológicas.
Aun con las cautelas propias de la investigación biomédica, una de las estrategias más prometedoras para el tratamiento del cáncer hepático es el uso de terapias basadas en herpesvirus de tipo I (HSV-1). El estudio ha analizado los cambios que se producen en el proteoma (conjunto de cientos de miles de proteínas) de células de cáncer de hígado cuando se infectan por un HSV-1. "Mediante tecnología proteómica, hemos identificado 25 proteínas celulares que se alteran antes de las primeras 24 horas tras la infección. Algunas de ellas participan de manera directa en un proceso de "suicidio" de las células cancerosas denominado oncoapoptosis. En resumen, se ha identificado parte de los mecanismos moleculares que hacen que las células tumorales hepáticas se destruyan por la acción de un HSV-1", explica el bioquímico Enrique Santamaría, investigador principal del estudio. También han participado María Isabel Mora, Joaquín Fernández-Irigoyen, Elvira Carro-Roldán, Rubén Hernández-Alcoceba, Jesús Prieto y Fernando Corrales, científicos del área de Terapia Génica y Hepatología y de la Unidad de Proteómica del CIMA, así como Corinne Potel y Alberto Epstein, de la Universidad de Lyon (Francia).
Según los especialistas, este trabajo suscita nuevas expectativas para el desarrollo de terapias contra el cáncer de hígado más eficaces y con menos efectos secundarios. "A partir de ahora nuestra línea de investigación se va a centrar en la puesta a punto de técnicas proteómicas que nos permitan obtener nuevos métodos de diagnóstico molecular para enfermedades como la cirrosis hepática y el cáncer de hígado", concluye Enrique Santamaría.