El pasado viernes 6 de junio, la Universidad de Navarra invistió a sus nuevos doctores. Desde  junio de 2013 hasta junio de 2014, han defendido su tesis 152 investigadores de 18 países distintos y pertenecientes a 15 facultades, escuelas e institutos.

En esta ocasión, la Facultad de Enfermería participó en el acto por primera vez en su historia. Cristina García-Vivar, subdirectora del departamento de Enfermería Comunitaria y Materno-Infantil, fue la madrina de la promoción. Con su discurso felicitó a los nuevos doctores por alcanzar "el máximo grado académico que la Universidad puede otorgar".

Según la profesora García-Vivar, el doctorado es además "la expresión máxima de una conducta ordenada y metódica de aprender la ciencia, social o experimental". Aprovechó también la ocasión para alentar a los nuevos doctores a continuar con su inquieta labor investigadora: "Ser universitario no es una condición estática; supone un crecimiento científico y profesional continuo que implica a su vez una responsabilidad social y la búsqueda de la verdad a través del estudio y la investigación". Para conseguir desarrollar con éxito sus objetivos, les recomendó "una receta con sabor tradicional para ser un buen profesional" que combina "tres ingredientes": entusiasmo y pasión, la búsqueda de la verdad y la humildad intelectual.

En la misma línea fue la invención del rector Alfonso Sánchez-Tabernero, que animó a los nuevos doctores a practicar un "sano inconformismo" desempeñando su quehacer investigador con "liderazgo y la generosidad". 

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