Una investigación de la Universidad de Navarra identifica nuevos factores de virulencia de la bacteria Brucella
Una investigación de la Universidad de Navarra identifica nuevos factores de virulencia de la bacteria Brucella
El trabajo de Raquel Conde ha dado lugar a la colaboración de la Universidad con el proyecto internacional 'InfectX'
Raquel Conde, investigadora del departamento de Microbiología y Parasitología de la Universidad de Navarra, ha identificado un componente de la membrana de la bacteria Brucella -causante de la brucelosis- que es clave en la virulencia de este patógeno.
Asimismo, en la elaboración de su tesis doctoral la científica ha analizado el uso de mutantes en estos componentes, con el objetivo de fabricar una vacuna verdaderamente efectiva contra a la enfermedad: "Los resultados preliminares, en modelo murino, son muy prometedores y ya han dado lugar a una patente. En este sentido, el hallazgo de una vacuna para animales que mejore claramente las actuales evitaría sacrificios inútiles y grandes pérdidas económicas en los países que la sufren", explica la nueva doctora.
Según añade, la FAO estima en unos 4.000 millones el número de animales susceptibles de padecer brucelosis. El 80% de ellos se encuentra en los países en vías de desarrollo. "En el caso de las personas", aclara, "la afección es grave, invalida a quien la padece, requiere de un tratamiento costoso y puede dejar secuelas. Y aunque afecta sobre todo a los animales domésticos, puede transmitirse al hombre a través del contacto con estos o del consumo de productos lácteos no higienizados".
Nuevo laboratorio contra la brucelosis
Raquel Conde se encuentra ahora realizando su posdoctorado en Basilea (Suiza), donde ha impulsado una posible colaboración de la Universidad de Navarra en el proyecto InfectX: un estudio que implica a varios laboratorios para comparar distintos patógenos -Bartonella, Listeria, Vaccinia Virus, Shigella- y saber cómo se sirven de los genes de las células huésped para entrar en ellas y provocar la enfermedad.
"Asimismo, en Basilea estamos montando un laboratorio con un alto nivel de seguridad, necesario para trabajar con Brucella, con el objetivo de incluir este patógeno en el proyecto InfectX. En su estudio, sin duda, será interesante contar con la experiencia de la Universidad en este campo", subraya la graduada de la Facultad de Ciencias.