El Máster en Enfermería en Cuidados Paliativos de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Navarra acaba de lanzar su nuevo folleto informativo. Una guía que, según María Arantzamendi, directora de este máster oficial, pretende "reflejar las claves de un máster en Cuidados Paliativos único en España". Un posgrado en el que además, como apunta Arantzamendi, "el 100% de sus antiguos alumnos tienen empleo".

Para conocer esta formación especializada hemos preguntado a Noelia García Rueda, participante en la pasada edición del máster. Aquí presentamos su experiencia:

¿Qué te suponen los cuidados paliativos?
Para mí son una filosofía del cuidado, un modo de acercarse y cuidar a la persona enferma. Supone una manera de trabajar que tiene en cuenta las necesidades del enfermo en todas sus dimensiones y ayuda a desarrollar con él una relación que promueve su empoderamiento. En general, son personas con una situación de fragilidad y vulnerabilidad a sus espaldas, por lo que formarme en cuidados paliativos implica una mayor comprensión de esa realidad. Así se facilita una práctica clínica de mayor calidad, que acompaña a la persona enferma y a su familia en su recorrido de la enfermedad.

¿Cómo te interesaste por este perfil de la atención al enfermo?
Trabajando en oncología observé situaciones complicadas, muy duras para el paciente con enfermedad avanzada y terminal. Comprobé que en ocasiones se podía hacer más por esas personas y que si no se hacía era porque no se sabía. Comprendí mi necesidad de formarme más para afrontar como enfermera estas situaciones y poder dar lo mejor a mis pacientes.

¿Cómo conociste el Máster en Enfermería en Cuidados Paliativos?
A través de una página del Ministerio de Educación que indicaba que había un máster sobre cuidados paliativos en la Universidad de Navarra. De ahí, entré en la página web de la universidad.

¿Qué aprendiste en él?
¡No podría resumirlo! En definitiva, lo que adquirí fue una perspectiva global, una visión nueva de la persona enferma en situación avanzada y terminal que me permitió adentrarme en la filosofía de los cuidados paliativos.

¿Qué destacas de tu paso por la Universidad de Navarra?
La formación práctica en cuidados paliativos es excelente y valoro, por encima de todo, la nueva visión de la persona enferma que me proporcionó. Además, quiero destacar la formación en investigación que recibí y que me llevó a valorarla como se merece, a comprender la necesidad en Enfermería de investigar y a considerar realizar un doctorado al terminar el máster.

¿Cómo te ha servido el máster para tu desarrollo profesional?
Para decantarme finalmente por la investigación. Ahora mismo estoy en la propia Universidad de Navarra, en el departamento de Enfermería de la Persona Adulta, realizando una tesis sobre la experiencia de vivir con cáncer en fase avanzada desde la perspectiva del paciente.

¿Recuerdas alguna anécdota en particular?
Todas las que conservo merecen la pena. Me quedo con el trabajo en equipo y la relación que desarrollé con varias personas enfermas y sus familiares