“En África la noción de tiempo es distinta: cuando visitas a un enfermo en su casa puedes quedarte más de una hora, hacerle sentir importante”
John Rhee, estudiante de posgrado en la Facultad de Medicina Mount Sinai (EE. UU.), impartió una charla sobre su estancia en Uganda, el país africano los cuidados paliativos más desarrollados
“En África la noción de tiempo es distinta: cuando visitas a un enfermo en su casa puedes quedarte más de una hora con él. Es una manera de cuidar al paciente que le hace sentir importante”. Así se ha expresado en la Universidad de Navarra John Rhee, estudiante de posgrado de Medicina en la Facultad de Medicina de Mount Sinai (Nueva York, EE. UU.).
Rhee impartió la ponencia ‘ÁFRICA: Un estudiante de medicina en Hospice Africa Uganda’. La actividad se enmarcó en el ciclo de coloquios ‘Cuidados Paliativos en tres continentes’, organizado por el Programa ATLANTES del Instituto Cultura y Sociedad, la Facultad de Medicina de la Universidad de Navarra y la Sociedad Navarra de Cuidados Paliativos. Se ha celebrado en el Colegio Oficial de Médicos de Navarra con el objetivo de dar a conocer programas de cuidados paliativos de todo el mundo. La actividad cuenta con la colaboración de la Obra Social 'La Caixa' y Fundación Bancaria Caja Navarra.
En su ponencia, John Rhee se centró en su estancia en el Hospice Africa Uganda (HAU), uno de los centros de cuidados más prestigiosos del continente. Entre otras actividades, llevó a cabo consultas a domicilio, ya que en África no se suele ingresar a los pacientes.
“No solo se trataba de administrar medicamentos, sino de atender la dimensión social y psicológica de los enfermos. Estos tienen dificultades, como se puede apreciar en la propia casa”, explica el estudiante. “A veces, son cosas tan simples como la distancia que deben caminar para ir al servicio o incluso que no hay un baño en la casa”, añade.
Según ha mencionado, en Uganda hay pocos recursos y los cuidados paliativos no están subvencionados por el Gobierno. “Muchas personas no pueden recibir estos cuidados porque no pueden pagar los tratamientos”, ha afirmado. A pesar de que cuentan con ayuda de ONG, que financian de forma gratuita consultas y medicamentos y que hay numerosos voluntarios nacionales e internacionales, a juicio de Rhee “no es un modelo de financiación sostenible”. “El HAU ha perdido parte de su financiación internacional en el último año y, en consecuencia, ha tenido que parar algunos proyectos”, ha lamentado.
Líder en ÁfricaUganda es uno de los países africanos con los cuidados paliativos más desarrollados debido a varios factores, subraya Rhee: desde el Ministerio de Sanidad se apoyan los cuidados paliativos, la ley permite a las enfermeras administrar opioides –ya que no hay muchos doctores-, es fácil acceder a los servicios y hay programas de formación –por ejemplo, en el HAU se imparte un diploma en cuidados paliativos-.
Además, desde el HAU se ha llevado a cabo un plan de educación sobre el uso de la morfina para explicar a familias y profesionales su administración y sus efectos. El objetivo ha sido combatir el miedo extendido al uso de este fármaco. “Encontré algún paciente que tomaba menos de lo que necesitaba y seguía con dolor, y otros que se resistían a tomarla”, ha apuntado Rhee.