El consultor ambiental Josep Maria Mallarach subrayó en la Universidad de Navarra que los espacios naturales protegidos son indispensables para conservar la naturaleza, aunque no son suficientes. "La eficacia de estos espacios depende de muchos factores, algunos de los más importantes no están al alcance de sus responsables". Para Mallarach, que participó en el ciclo de conferencias Green Learning con una sesión sobre la efectividad de los espacios naturales protegidos y los retos en época de crisis, "tan importante es el nivel de protección de estos espacios como quién toma las decisiones sobre su gestión y la coordinación con las actividades que pueden incidir en ellas desde otros sectores".

Según este experto, miembro de la Comisión Mundial de Áreas Protegidas de la Unión Internacional para la Conservación, los espacios naturales protegidos sirven, entre otras cosas, para preservar procesos ecológicos y evolutivos, conservar ecosistemas, velar por el uso sostenible de los recursos, así como mejorar la salud física y anímica de la sociedad y fomentar el respeto al patrimonio cultural y natural asociado.

Desde un punto de vista político, las áreas protegidas se consideran en general un componente esencial de sostenibilidad ecológica, económica y social. Son un complemento necesario de las políticas de desarrollo local, salud y educación ambiental. "Una sociedad no puede estar sana física y mentalmente en un entorno deteriorado, con una naturaleza contaminada y destruida", señaló.

En su opinión, es difícil mejorar la efectividad de estas áreas en época de recortes, pero es posible: "hace falta integrar en las políticas sectoriales las estrategias de conservación de la biodiversidad, para reducir al máximo los efectos colaterales negativos a la conservación. Además, hay que evaluar la efectividad de los espacios naturales protegidos para impulsar una buena gestión adaptativa, reorientando los recursos disponibles hacia los puntos más necesitados". "En este sentido, -indicó-, se precisa el seguimiento de indicadores ecológicos clave y en este campo las universidades podrían implicarse y ofrecer su colaboración".

Situación de las áreas naturales en España

El experto distinguió seis categorías de espacios naturales protegidos, según la Unión Internacional para la Conservación: reserva integral, parque nacional, monumento natural, reserva natural gestionada, paisaje protegido y grandes ecosistemas con gestión tradicional. En España y en Europa predominan los espacios de categoría V, paisajes protegidos (70% y 65%, respectivamente).

En concreto, en España más del 27% del territorio está legalmente protegido (un 13% mediante legislación nacional o autonómica, el resto internacional). Los espacios naturales en España reciben más de 30 millones de visitantes al año y sostienen y promueven significativas economías locales.

En cuanto a la gobernanza de estas áreas, Mallarach distinguió cuatro tipos principales: gestión pública, gestión compartida entre organismo públicos y entidades privadas, de gestión privada y espacios generalmente sin declaración legal en manos de comunidades locales tradicionales (a nivel mundial, la mayoría están dentro de esta último tipo). "En España predominan los espacios de gestión pública y, dentro de éstos, los gestionados por administraciones que dependen de los gobiernos autonómicos", explicó. "La evaluación periódica de la efectividad ayudaría a identificar oportunidades para impulsar nuevas fórmulas, mejor adaptadas a la situación actual, más creativas y efectivas de gestionar este valioso patrimonio natural".