Una tesis analiza la autorregulación, resiliencia y estilos de afrontamiento como factores que promueven el bienestar de los jóvenes universitarios
Claudia López Madrigal ha contado con una muestra de 1.300 universitarios de campus españoles en su doctorado, dirigido por investigadores del Instituto Cultura y Sociedad y la Facultad de Educación y Psicología
13 | 02 | 2023
Claudia López Madrigal ha defendido su tesis doctoral ‘Evolución de los factores de bienestar psicológico en jóvenes adultos universitarios’. La ha elaborado en el grupo ‘Jóvenes en transición’ del Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra, bajo la dirección de Jesús de la Fuente y Javier García Manglano, y la ha defendido en la Facultad de Educación y Psicología.
En su investigación se ha centrado en los factores involucrados en el desarrollo positivo y bienestar de los adultos emergentes. Para ello ha analizado una muestra de 1.300 universitarios de entre 18 y 25 años, provenientes de diferentes campus españoles. En concreto, ha analizado “aquellas variables consideradas metahabilidades, como la autorregulación, resiliencia y estilos de afrontamiento”, ha explicado.
“El marcado interés en la Psicología por comprender el funcionamiento del ser humano desde una perspectiva no patologizante ha favorecido una perspectiva del desarrollo a favor de las fortalezas y cualidades del ser humano”, ha comentado.
A su juicio, comprender las vías necesarias para lograr un desarrollo positivo adecuado “se hace especialmente necesaria en los jóvenes adultos por la transición individual, académica, relacional y social correspondiente a la etapa del desarrollo en la que se encuentran”. Así, considera crucial “identificar aquellos factores que optimizan su comportamiento para ofrecer oportunidades que ayuden a mejorar el curso de su bienestar futuro”.
Factores individuales y contextuales
A través del Modelo Presagio, Proceso y Producto, desarrollado por el catedrático de Educación John Biggs, la tesis de Claudia López Madrigal ha validado diferentes relaciones, así como su naturaleza y direccionalidad, entre las variables presagio (edad, sexo y contexto educativo), las variables de proceso (autorregulación, estrategias de afrontamiento, resiliencia y positividad) y las variables producto (prosperidad y salud).
En primer lugar, la investigadora ha concluido que el sexo es una variable predominantemente importante en la adquisición de competencias. En concreto, “actúa como variable predictora de la autorregulación y las estrategias de afrontamiento enfocadas en el problema”, ha puntualizado.
Asimismo, ha subrayado que, a pesar de que se encuentran algunos efectos de asociación y predicción, la edad no determina cambios en lo que respecta a las estrategias de afrontamiento. Esto respalda, según ha apuntado, la idea de que el paso de los años en sí no produce un cambio en la competencia del manejo del estrés.
Por otra parte, ha destacado que el efecto combinado de la edad y el sexo “predice algunas competencias como la reevaluación positiva, la tolerancia al estrés, la adaptación al cambio y el establecimiento de objetivos”. Esto pone de manifiesto “la importancia de considerar a la edad y el sexo como variables vinculadas a la adquisición de metahabilidades”.
Otro de los hallazgos de la tesis de Claudia López Madrigal es que la autorregulación ha demostrado ser una metahabilidad importante “que de manera transversal favorece la presencia de otras habilidades emocionales como la resiliencia, específicamente la resiliencia proactiva, y las estrategias de afrontamiento enfocadas en el problema”.
Asimismo, ha determinado que el contexto educativo importa: “Ha demostrado ser un factor vinculado a las estrategias de afrontamiento enfocadas en el problema y a los factores reactivos de la resiliencia –espiritualidad y tolerancia al estrés-”. Ha considerado que, junto con la autorregulación, es un predictor indirecto de la salud psicológica y física. “Esto muestra indicios de que el entorno educativo en el que esta población se encuentra se relaciona con su bienestar”, ha argumentado.
En cuanto a las variables personales y contextuales de presagio (autorregulación, contexto educativo, edad y sexo), la nueva doctora ha indicado que mostraron tener un efecto indirecto sobre ambas variables producto (prosperidad y salud).
“El efecto combinado de los factores individuales y contextuales es importante para la adquisición de competencias psicológicas, bienestar y salud en jóvenes universitarios”, ha puntualizado finalmente. Según ha detallado, las numerosas combinaciones que pueden resultar de la interacción individual y contextual resultan fundamentales para comprender las necesidades de esta etapa evolutiva.
Esta tesis guarda relación con dos proyectos de la Facultad de Educación y Psicología: ‘Motivational-affective strategies of personal self-regulation and coping with stress in the university teaching-learning process’, financiado por el entonces Ministerio de Economía y Competitividad y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional [Ref. EDU2011-24805 (2012-2015)] y ‘Efecto de las emociones académicas en el proceso de enseñanza-aprendizaje y la salud de los estudiantes universitarios’, financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación, el Fondo Europeo de Desarrollo Regional y la Agencia Estatal de Investigación [PGC2018-094672-B-100 (2018-2021)].