“En el grado me enseñaron a pensar. A preguntarme siempre el porqué de las cosas”
Tomás Soria (Química 15) ha recibido el premio extraordinario del Grado de Química
FOTO: Manuel Castells
Tomás Soria (Química 15) ha enfocado su carrera al ámbito de la investigación, para lo cual realiza un máster en Química y Polímeros en la UPV. De su paso por la Facultad de Ciencias se queda con unos profesores que le enseñaron “a pensar” y a no dejar de preguntarse el porqué de las cosas.
- ¿Cómo has recibido el reconocimiento del premio extraordinario de Grado?
Sinceramente, no me lo esperaba; así que ha sido una gran sorpresa que he celebrado con mi familia. Es el premio a cuatro años de trabajo.
- ¿Qué consideras que es lo que más te ha ayudado para obtener tus buenos resultados en un grado tan exigente?
Básicamente, el trabajo diario. Suelo intentar llevar mis estudios al día, no me gusta dejarlo para vísperas de examen y, desde luego, si tengo dudas, pregunto. Considero además que mi entorno familiar me ha ayudado, así como la dedicación de los profesores de la carrera.
- ¿Hacia dónde vas a dirigir ahora tu futuro profesional?
Ahora estoy realizando el Máster de Química y Polímeros en la UPV de San Sebastián. Cuando termine me gustaría hacer un doctorado. La verdad es que me gusta la investigación y espero poder combinarla con la docencia, el día de mañana.
- ¿Qué ha sido para ti lo mejor y lo más duro de haber cursado el grado en Química?
Lo mejor del grado fue conocer a profesores que me enseñaron a pensar, a preguntarme el porqué de las cosas. A ello debo añadir otros aspectos que considero muy positivos: las horas de laboratorio -que vuelan cuando te gusta lo que haces-, la suerte de haber sido alumno interno del grupo MIMED -con doctores que me orientaron muy bien-, y, cómo no, conocer a muy muy buenos amigos. En el lado opuesto estaría el tiempo invertido en los informes, que resultaban pesados, y el hecho de cursar 4º con el agobio del TFG encima.