Diez graduados de la Universidad logran una de las 309 plazas ofertadas en el examen FIR
Los navarros Iñigo Artieda (79), Naike Velilla (86) e Iranzu Elcano (100) se sitúan entre los 100 primeros puestos
16 | 02 | 2023
Diez graduados en Farmacia de la Universidad de Navarra han obtenido una de las 309 plazas que el Ministerio de Sanidad ha ofertado este año en el examen de Farmacéutico Interno Residente (FIR). Además, tres de ellos se sitúan entre los 100 primeros puestos. Son los navarros Iñigo Artieda, natural de Zizur Mayor, con el número 79, Naike Velilla, de Undiano, en el lugar 86, e Iranzu Elcano, procedente de Miranda de Arga, que ha alcanzado la ubicación 100. Les siguen en la lista Leticia Altaduna (123), Beatriz Tajadura (142), Julia Lapeña (191), Javier Idiazabal (236), Manuel Rouco (240), Leyre Ruiz (281) y Leyre Echegoyen (305). En esta edición se presentaron al exámen un total de 1.599 candidatos.
En el caso de Iñigo Artieda, confiesa que no ha tenido una vocación de FIR desde el inicio. “Tras acabar el grado empecé a trabajar en la industria, pero después de un año vi que no era lo mío. Hablé con algunos compañeros que estaban en el hospital, me contaron cómo era su día a día y eso me llamó la atención. Además, en las prácticas que realicé al final de quinto descubrí que también me gustaba el ambiente hospitalario”.
Sobre el examen, Naike Velilla lo describe como “diferente a otros años, más pesado, muy largo”. “Terminé el doble grado en Farmacia y Nutrición Humana y Dietética en enero del año pasado, pero desde hace unos años tenía bastante claro que quería hacer el FIR”. En su caso, no tiene decidida la especialidad por la que optará, aunque está segura de que elegirá entre Análisis clínicos o Microbiología. Para eso, asegura que hay dos personas que le han marcado en su paso por las aulas: “Los profesores Nerea Varo y Gabriel Reina y su asignatura de “Análisis clínicos” me han motivado para elegir estas especialidades”.
Para Iranzu Elcano, los últimos meses han supuesto un camino de mucho sacrificio y esfuerzo, pero que “sin duda ha merecido la pena”. “Desde segundo de carrera me di cuenta de que me gustaban mucho las asignaturas más clínicas: fisiopatología, farmacología, microbiología, bioquímica clínica y farmacia clínica sin duda fueron las que me ayudaron a decantarme por el FIR”, explica. “Aún no tengo del todo clara la especialidad pero sí que será farmacia hospitalaria o microbiología. Ahora me queda ir a las puertas abiertas de los hospitales y terminar de aclarar ideas”.