Herramientas para hacer frente a los efectos psicológicos provocados por la Covid-19
Más de 60 personas asistieron a un webinar organizado por la Facultad de Enfermería para hablar de cuidado y autocuidado
La Facultad de Enfermería de la Universidad de Navarra celebró el pasado 15 de junio un webinar para hablar de los efectos psicológicos derivados de la pandemia de Covid-19 y ofrecer algunas claves para el autocuidado de los profesionales sanitarios.
La sesión estuvo a cargo de Helena Escalada, médica de familia y especialista en Cuidados Paliativos, y Karol Machiñena, enfermera especialista en Salud Mental. Asistieron más de 60 personas, algunas conectadas desde otros países de Europa, como Portugal y República Checa, y desde América Latina como Chile, Colombia, Bolivia o Brasil.
Las dos ponentes coincidieron en que la magnitud de la pandemia ha sido algo que nos ha sorprendido a todos. “Nos parecía increíble que pudiese pasar algo así, con nuestro sistema sanitario, todos los avances médicos de que disponemos… Y eso nos ha desconcertado”, explicó Karol Machiñena. “Hemos vivido situaciones muy complicadas y no podemos pasar página sin más. Es difícil volver a la normalidad. Nos va a dejar huella. Pero ojalá nos sirva de aprendizaje vital”, añadió. “Todo lo que nos pasa en la vida constituye nuestro equipaje. Y ante lo que hemos vivido estos meses es necesario reflexionar, dialogar con uno mismo para integrarlo en quienes somos”, afirmó Helena Escalada.
“Nos ha faltado mucha información: sobre la agresividad del virus, sobre el tiempo que iba a durar el confinamiento… Eso crea incertidumbre e inseguridad, y es lo que produce el miedo y el bloqueo que repercute en nuestra vida personal, en nuestra relación con los demás y a nivel profesional”, explicó Karol. Preguntada sobre cómo gestionar esa incertidumbre, afirmó la necesidad de mirar al futuro con esperanza: “Ahora conocemos más sobre el virus y cómo controlarlo, y a nivel sanitario estamos mejor preparados. Esto nos puede proporcionar cierta sensación de control de cara al futuro, aunque no sea total porque no depende cien por cien de nosotros. La tranquilidad nos protege y nos da esperanza”.
En ese mismo sentido, Helena destacó la importancia de vivir el presente. “Hay que ir más despacio. Pensar en el hoy y no en el mañana nos ayuda. Y también buscar el equilibrio entre lo que tenemos que hacer y lo que nos gusta hacer”, afirmó.
Preguntadas por los asistentes, las dos ponentes destacaron el papel de los grupos de apoyo y la necesidad de buscar el modo de despedirse ante la pérdida y de dedicar tiempo de calidad a la familia y a las personas queridas, priorizándoles para recuperar lo perdido en estos meses de separación.
“Nuestro trabajo es cuidar personas, nos apasiona. Y, a veces, eso hace que descuidemos nuestro propio cuidado”, reconoció Helena. “Cuando ya no puedes más, es difícil autocuidarse”, destacó Karol, haciendo referencia a la situación de agotamiento físico y mental a la que ha llevado esta pandemia a muchos profesionales sanitarios. “La clave ahora es identificar que necesitamos cuidarnos, reconocer que nos pasa algo”, aconsejó.
“Los equipos en los que trabajamos también son clave para sobrellevar estas situaciones tan complicadas”, afirmó Helena. “En ese sentido han sido fundamentales las buenas relaciones interpersonales, la comunicación del equipo, la flexibilización de horarios. Nos hemos cuidado, también, unos a otros”, concluyó.