El desarrollo rural, 'en manos' de los universitarios
Estudiantes de la Universidad han realizado prácticas en 20 poblaciones diferentes de Navarra gracias al programa "Revitalizar el Patrimonio Rural"
18 | 09 | 2023
Desde marzo, pero sobre todo en la época estival, 33 estudiantes de la Universidad de Navarra han realizado prácticas en 20 poblaciones de la Comunidad foral. Esto ha sido posible gracias al proyecto Revitalizar el Patrimonio Rural, resultado del acuerdo entre la Universidad de Navarra, la Dirección General de Administración Local y Despoblación del Gobierno de Navarra y la Fundación La Caixa, entidad que financia el programa.
“La iniciativa surge como respuesta a los graves problemas relacionados con la despoblación y pérdida de vitalidad social y económica que sufren amplias zonas del territorio navarro y el objetivo que persigue es revertir -o al menos paliar- los efectos que tiene en el patrimonio natural, cultural y social de nuestra tierra”, explica Juanjo Pons, profesor de la Facultad de Filosofía y Letras e impulsor del proyecto.
Los estudiantes han realizado prácticas en las localidades y municipios navarros de: Abárzuza, Acedo, Arizala (y tierras de Iranzu), Arteta (y valle de Ollo), Berbinzana, Cascante, Dicastillo, Elizondo, Falces, Fitero, Gallipienzo, Irurita, Javier, Lakuntza, Lerín, San Martín de Unx, Sangüesa (y comarca), Santa Criz de Eslava, Urroz Villa y Villanueva de Arce.
Los jóvenes pertenecen a siete facultades y estudian grados como Historia, Periodismo, Relaciones Internacionales, Pedagogía, Magisterio, Biología y Gestión Aplicada. Varios de ellos han podido completar más de una práctica en diferentes entidades y empresas, públicas y privadas, como ayuntamientos, fundaciones, asociaciones y museos. En total, han realizado 40 prácticas.
“Es muy relevante que los jóvenes universitarios (en muchos casos urbanitas) conozcan de primera mano el medio rural y convivan con sus habitantes. Aportan sus conocimientos, su talento y su ilusión ayudando en tareas que diferentes entidades públicas y privadas enraizadas en el territorio han detectado como necesidades para los pueblos. Quién sabe si, a través de esta experiencia ‘inmersiva’, salen futuras oportunidades laborales y vocaciones repobladoras para esos entornos”, comenta Juanjo Pons.
En su primer verano universitario, Iria Rodríguez Ezpeleta, estudiante de Bioquímica con el Science Business Program, ha realizado prácticas en ICARRA Asociación para la Conservación de Gallipienzo. Esta es una institución creada por sus vecinos en el año 1979 con el fin de preservar la infraestructura y memoria del pueblo y mantener la unidad entre sus habitantes. La familia de Iria es oriunda del municipio y ella ha pasado los veranos corriendo por sus calles. “Gallipienzo me ha visto crecer y ahora yo quiero ayudarle a crecer en este momento de despoblación. Un programa que busca la preservación de Navarra merece toda la atención que pueda recibir”, comenta.