"La creación de un clima de confianza entre los profesores y los alumnos es clave para el buen desarrollo de las clases de Ética Empresarial”. Así lo subrayó el profesor Alejo Sison durante su intervención en el taller Teaching Business Ethics organizado por la Facultad de Económicas de la Universidad de Navarra el pasado 8 de junio.

“No se trata tanto de halagar a los alumnos, diciéndoles lo que les gustaría oír, sino de transmitir lo que, a juicio del profesor, necesitan conocer para obrar bien”, añadió Sison. En este sentido, el profesor matizó que no se puede entender a los alumnos como clientes a los que hay que satisfacer, sino que estos deben entender que ellos mismos son el producto que, con su permiso, el profesor ayuda a forjar.

Los organizadores del taller creen que la ética ha ganado un amplio reconocimiento como una disciplina central de los negocios y aseguran que este encuentro busca crear un foro para debatir cómo aplicar la teoría de la ética empresarial a la práctica.

El profesor Alejo José G. Sison es catedrático de la Facultad de Económica y profesor visitante de la Busch School of Business and Economics de la Catholic University of America para el curso 2018-2019. Además de labores docentes, también realiza investigaciones en le ámbito de la ética empresarial a través del grupo Virtue Ethics in Business que de que es director, junto con el decano de la Facultad de Económicas Ignacio Ferrero.

Un nuevo manual

El evento sirvió también como plataforma de presentación del nuevo libro Ética empresarial: una ética de la virtud y un enfoque del bien común (Routledge2018). Los diferentes autores de los capítulos presentaron sus trabajos y explicarán cómo puede ser utilizado en un ambiente de clase.

Los autores del libro aseguran que se trata del primer libro de texto sobre ética empresarial que adopta un enfoque de ética de la virtud. El nuevo manual explica cómo la ética de la virtud se compara con los enfoques alternativos de la ética empresarial, como el utilitarismo y la deontología, y sostiene que la ética de la virtud sirve mejor al bien común de la sociedad.