Seis versiones en gran formato de la obra Untitled (1969) de Mark Rothko, expuestas sobre el escenario del Teatro del Museo Universidad de Navarra, han puesto el broche de oro este 19 de diciembre al proyecto Rothko.50. Los autores son los 1.512 escolares, de entre 6 y 18 años y de 28 centros educativos navarros, que han participado en esta iniciativa impulsada por el Área Educativa del Museo, con el apoyo de Fundación Caja Navarra. Al acto de clausura han asistido alumnos de los colegios Escolapios Calasanz, Santo Tomás, María Inmaculada, Santa Catalina, El Molino, IES Mendillori e Irabia-Izaga. Los alumnos de estos dos últimos centros, además, han realizado los dos últimos talleres del programa.

El punto de partida de este proyecto, desarrollado de septiembre a diciembre de este año, es el 50 aniversario de Untitled, obra que pintó Rothko un año antes de su fallecimiento. Para celebrar esta efeméride, el Museo ha invitado a participar a alumnos de Educación Primaria, ESO, Bachillerato, Formación Profesional, Educación Especial y colectivos en riesgo de exclusión social. Entre los principales objetivos se encuentran aprender a mirar, potenciar la creatividad, el trabajo en equipo y desarrollar la filosofía learning by doing, aprender haciendo y, además, divertirse.

Fernando Echarri, responsable del Área Educativa del Museo, subraya que “vivimos en una sociedad muy rápida y el proyecto propone parar para aprender a mirar en profundidad, a contemplar. Por eso, la primera actividad de cada taller es ver la obra. Además, otro objetivo es trabajar la creatividad, que cada vez es más valorada. Y se enfoca, sobre todo, en la toma de decisiones y en la resolución de problemas”.

AUTOCONOCIMIENTO A TRAVÉS DEL ARTE

Así, tras la contemplación de la pintura y conocer las claves biográficas y artísticas del autor, los escolares trabajan en los talleres del museo. “Todos tienen que reproducir obras de Rothko y deben tomar decisiones sobre la técnica, los colores, las formas…, basándose en la técnica del artista”. Además, los participantes aprenden a interpretar. “Trabajamos el autoconocimiento a través del arte contemporáneo”, apunta Echarri. Así, cada escolar ha creado dos versiones personales, una con rotuladores y la otra empleando la técnica del collage.

Además, de forma colectiva, todos han participado en la creación de las reproducciones en gran tamaño, los seis murales colaborativos. “Han pasado muchos grupos y solo hemos creado seis murales. Los alumnos han tomado así conciencia de que algo aparentemente sencillo, en realidad es complejo. La luz que tiene el color de Rothko es muy difícil de crear”, destaca el responsable del área. Gracias a este proyecto, además, aprenden a trabajar el equipo y experimentan la satisfacción de realizar un proyecto entre todos.

Antes del proyecto Rothko.50, en el Museo se desarrollaron dos proyectos educativos: el proyecto Gernika, en el curso 2017-18, con motivo del 80 aniversario de la obra de Picasso y de la existencia en la colección del Museo de la obra de Oteiza Estela para un pueblo pacífico que era Gernika.  El curso 2018-19 se realizó el proyecto Kandinsky en la Plaza del Castillo, a partir de la obra del artista ruso perteneciente a la colección. Además de conocer su historia y su técnica, se dio a conocer la visita que realizó a Pamplona en 1929 junto a otros artistas de la Bauhaus. En ambos proyectos se realizaron grandes murales colaborativos. En 2020 un nuevo proyecto tomará el relevo.