Miguel Ángel Martínez González, catedrático de Medicina Preventiva en la Universidad de Navarra, impartió el seminario "Del contraste de hipótesis convencional en ciencia a la hipótesis de la evolución", organizado por el Grupo de Investigación ‘Ciencia, Razón y Fe' de la Universidad de Navarra.

El profesor Martínez Gonzalez hizo referencia al azar, un concepto fundamental en la Teoría de la Evolución: "En teoría, el azar podría explicar cualquier asociación o fenómeno de la naturaleza, por extraño o improbable que pareciese. Pero la bioestadística, una herramienta básica de la epidemiología moderna, usa el contraste de hipótesis para estimar la probabilidad de encontrar un resultado al menos tan extraño como el observado, si todo fuese debido meramente al azar", explicó.

"Convencionalmente -añadió-, cuando tal probabilidad es baja, se rechaza la hipótesis de que el azar podría explicarlo todo y se afirma en cambio que existe una asociación estadísticamente significativa. Estas dos últimas palabras han plagado la literatura científica actual, quizás con la excepción de la biología evolutiva, en la que no parecen ser tan abundantes. Pero una mera asociación, por muy significativa que sea, no demuestra causalidad".

Para el catedrático de Medicina Preventiva, la epidemiología supone un paso más, "pues usa una serie de criterios y modelos para dar el paso de la ‘asociación estadísticamente significativa' a la auténtica relación de causa-efecto. En estos modelos la fracción atribuible a la causalidad se opone frontalmente a la fracción atribuible al azar".

En referencia a las posturas darwinistas, el experto no negó que "exista evolución, pero no deja de ser al menos intrigante para un epidemiólogo que el evolucionismo radical parezca equiparar azar con causalidad".