Fundación Caja Navarra financia el Programa CRECES de la Universidad de Navarra
Se trata de una investigación de la Facultad de Enfermería para promocionar la adquisición de hábitos de vida saludables en la infancia
FOTO: Manuel Castells
Fundación Caja Navarra ha resuelto financiar el Programa CRECES (Cuidándote: Reforzando la Educación para la salud en la Competencia Emocional y Social) de la Universidad de Navarra. El objetivo del estudio es incrementar la adquisición de hábitos de vida saludables en la infancia.
Este programa piloto, en el que han participado 38 niños navarros de 5 y 6 años, ha consistido en una intervención para mejorar la conciencia emocional y habilidades sociales básicas como parte de los estilos de vida saludable.
Durante cinco semanas se han trabajado las competencias socio-emocionales a través de experiencias relacionadas con la alimentación, la higiene y autonomía personal, la actividad física y el hábito del sueño y descanso. Para su evaluación se han realizado diferentes juegos y actividades basadas en estrategias de aprendizaje activo y dinámicas de grupo.
El programa CRECES, dotado con 6.000 euros, está dirigido por Olga López de Dicastillo y Agurtzane Mujika Zabaleta, doctoras de la Facultad de Enfermería y miembros del Instituto de Investigación Sanitaria de Navarra (IDISNA). Sus resultados se esperan para septiembre.
Por un desarrollo infantil social y emocional saludableEn la actualidad se está produciendo un incremento de los trastornos en la infancia afectados por factores psicosociales que influyen directamente en la salud. Según la última memoria anual de la Dirección de Salud Mental del Gobierno de Navarra (2013), más del 10% de la población infantil padece estos problemas. Para abordarlos se necesita que los distintos profesionales que están en contacto con la infancia trabajen juntos en su promoción, prevención y tratamiento.
El programa CRECES, que forma parte de la tesis doctoral de Elena Bermejo, investigadora de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Navarra, evidencia el papel de la enfermería como "un profesional fundamental para potenciar el bienestar de los niños desde una concepción integral de la salud, incluyendo acciones que no solo promuevan su salud física, sino también su dimensión social y emocional". "Una labor muy deficitaria en esta área por parte de la enfermería que, hasta el momento, ha estado centrada principalmente en los aspectos más físicos de la salud, o en su caso, con un carácter preventivo orientado a la detección precoz de los problemas psicosociales", señala la investigadora.
Este programa está enmarcado dentro del Proyecto SINERGIA, un amplio estudio del centro académico que pretende desarrollar, implementar y evaluar, a medio-largo plazo, intervenciones orientadas a la promoción de la salud y la prevención de enfermedades en la población infantil, trabajando desde varios ámbitos (familiar, educativo y sanitario), y teniendo en cuenta tanto las necesidades de los niños y sus familias, como los recursos y el contexto.