"Esperaba a salir de trabajar para poder irme a beber y a drogarme"
Mesa redonda con pacientes que han consumido sustancias dentro del proyecto Pre(ad)diction
25 | 09 | 2023
Pocas veces se tiene la oportunidad de dialogar con pacientes que han consumido drogas en una charla de tú a tú. El proyecto Pre(ad)diction, en el que intervienen varias facultades de la Universidad de Navarra, ha organizado una mesa redonda para estudiantes en la que han participado Jorge y Alba, nombres ficticios elegidos por sus protagonistas, para relatar su experiencia en cuanto a drogas y alcohol se refieren.
“Empecé a beber en la mili, con 22 años, y también empecé con los porros” cuenta Jorge, quien ahora tiene 62 “tenía una empresa, familia, amigos y una novia. Después lo perdí todo. Es un desastre estar enganchado, porque crees que estás bien cuando en realidad no lo estás”. Su proceso de cambio comienza cuando tiene un accidente grave “que me costó veinte mil euros para reconstruirme los dientes por una caída”. A veces los sustos son los que más recalan para cambiar el chip. Como fue el caso de Alba, quien dejó de hablarse con su hermano: “Empecé a beber a escondidas en casa, a fumar los fines de semana con mis amigas y me pasé a las metanfetaminas. Me alejé de mi familia y mi hermano no me habla. Eso es lo que me llevó a pedir ayuda hace dos meses”.
Pero como todo túnel, siempre hay una luz al final: “ahora tengo amistades sanas. He empezado un camino que no quiero deshacer por lo bien que me veo ahora” asevera Alba. “Lo mejor que puedo hacer es ocupar mi tiempo. Hago deporte, estudio inglés y los fines de semana los dedico a la astronomía” añade Jorge, quien además bromea diciendo que “¡con la priva se me difuminaban las estrellas!”.
Según un informe del Plan Nacional de Drogas del 2022, las sustancias más consumidas durante el último año han sido el alcohol (76,4 %), el tabaco (39 %), los hipnosedantes (13,1 %), el cannabis (10,6 %) y la cocaína (2,4 %). El cannabis es la droga con más prevalencia actualmente, habiendo sido consumida alguna vez en la vida por algo más del 40 % de la población. Respecto a la cocaína en polvo, un 11,7 % de los participantes en las encuestas reconoció haberla consumido alguna vez en la vida, siendo la edad media de inicio 21 años. La droga no conoce de sexos, aunque ellos son más consumidores que ellas, la percepción no es la misma. Alba asegura que “existe una discriminación de género, porque las mujeres no se atreven a pedir ayuda por haber mayor estigma. Por ejemplo, si tienen hijos, a que les quiten la custodia”.
Un apoyo en Navarra
ANTOX es la asociación a la que pertenecen Alba y Jorge, gracias a ellos han podido salir adelante. Se trata de una Asociación Navarra para la Investigación, Prevención y Tratamiento de Adicciones. Nace en 1981 por un grupo de familiares que tenían personas cercanas afectadas por la drogodependencia, y un año después en 1982 se pone en marcha la Comunidad Terapéutica de Larraingoa. Liderada por un Equipo de profesionales de diversas especialidades: Medicina, Psicología, Trabajo Social, Educación social, la creación de este recurso asistencial, es el punto de partida para el crecimiento de la Asociación que ha ido evolucionando hasta nuestros días, adaptándose a las necesidades de la sociedad y las personas atendidas y siempre con el objetivo y compromiso de prestar servicio y dar respuesta frente a nuevas demandas de tratamiento.