Un investigador del CIMA de la Universidad de Navarra identifica 200 proteínas que detectan enfermedades del hígado
Un investigador del CIMA de la Universidad de Navarra identifica 200 proteínas que detectan enfermedades del hígado
El bioquímico Enrique Santamaría descubre biomarcadores para mejorar el diagnóstico de los métodos convencionales
El bioquímico Enrique Santamaría Martínez, investigador del área de Terapia Génica y Hepatología del CIMA de la Universidad de Navarra, ha identificado más de 200 proteínas que pueden considerarse indicadores de progresión de la esteatohepatitis y el cáncer de hígado. Además, establecen la base para nuevas líneas de investigación que podrían desarrollar estrategias de aplicación clínica para mejorar el diagnóstico y el tratamiento de este cáncer. El trabajo forma parte de su tesis doctoral, presentada en la Facultad de Ciencias.
Según explica, el estudio de las enfermedades hepáticas es hoy uno de los objetivos prioritarios de la biomedicina, debido a la creciente prevalencia en la población de estas patologías. Aunque se conocen bien factores de riesgo, como los genéticos y el consumo abusivo de alcohol, los mecanismos que participan en su desarrollo no son tan conocidos.
Concluida la investigación, señala que "uno de los biomarcadores, en concreto la forma oxidada de la apolipoproteína A1, se ha detectado en el suero de pacientes con cáncer de hígado. Por ello resulta especialmente relevante en el campo del diagnóstico".
El trabajo del Dr. Enrique Santamaría demuestra "la alteración de proteínas en el hígado y, consecuentemente, de las funciones biológicas asociadas a ellas, mucho antes de que se produzcan alteraciones detectables en el hígado utilizando métodos de diagnóstico convencionales". Es el caso de laprohibitina, una proteína implicada en la generación de energía para mantener la actividad celular, o la regucalcina, proteína implicada en el control del envejecimiento celular, entre otras.
Para la investigación realizada en el CIMA de la Universidad de Navarra ha utilizado nuevas tecnologías, como la proteómica. "Esta técnica permite estudiar cientos de proteínas simultáneamente y así definir la historia natural de enfermedades a nivel molecular e identificar marcadores que faciliten el diagnóstico y el tratamiento de estas alteraciones".