12.000 niños de 5 países desarrollan la “alfabetización afectiva” gracias a una serie de libros del ICS
Lanzado en 2015, ‘Quiero querer’ es un programa de educación del carácter y la afectividad para la escuela primaria que incluye libros para alumnos y para padres
FOTO: Isabel Solana
La serie de libros Quiero querer, impulsada por investigadores del Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra, ha llegado desde su lanzamiento en 2015 hasta ahora a más de 12.000 jóvenes y a padres de 4.000 familias de España, Chile, Guatemala, Costa Rica y México.
Esta colección es un programa de educación del carácter y de la afectividad para alumnos de la escuela primaria que también ofrece guías para que los padres acompañen a sus hijos en el proceso de formación de su personalidad y su afectividad. Se trata de una propuesta de desarrollo de hábitos positivos de vida y educación emocional sobre la base de la Pedagogía de la Integración de la Persona Humana.
A lo largo de los capítulos se abordan cuestiones que abarcan todas las dimensiones de la persona humana: biológica (salud, identidad, corporalidad y crecimiento), psicológica (alfabetización afectiva y desarrollo de la personalidad), espiritual (virtudes y habilidades) y social (familia, escuela y sociedad).
Enfoque y lenguaje adaptados a cada edadLos volúmenes están coordinados por Carlos Beltramo, doctor en Educación e investigador de del proyecto ‘Educación de la afectividad y la sexualidad humana’ (EASH) del Instituto Cultura y Sociedad. Explica que “el enfoque y el lenguaje se adaptan a las características y necesidades de cada edad, por lo que es una herramienta muy útil para que los docentes toquen en el aula estos temas fundamentales y los niños se sientan involucrados en primera persona”.
El investigador recuerda que antes de lanzar la colección, en las labores de consultoría que el equipo de EASH desarrolla en distintos colegios, los profesores les expresaban su deseo de contar con un material actualizado que incluyera tanto la formación en virtudes como la educación emocional.
Teniendo en cuenta las necesidades que detectaron y revisando los programas oficiales de distintos países, elaboraron la colección. “Desde que se publicó -añade-, numerosos colegios de distintas condiciones los utilizan en el aula, aplicando los materiales a la realidad de su alumnado y de su perfil”.
“En diferentes países, maestros y padres de familia con los que hablamos nos agradecen el material porque les está permitiendo estructurar una materia que hoy preocupa mucho en el campo educativo”, reconoce. Como ejemplo, cuenta que cientos de padres y maestros se han reunido en Guatemala con investigadores del ICS hace unas semanas para tratar estos temas.
Así, considera que “es un privilegio poder entregar a los centros educativos un material que aúne la educación de las virtudes, la educación emocional y el compromiso social desde la primera infancia”.
Un caso menos habitual: jóvenes con discapacidad intelectualTambién alude a un caso reciente y menos habitual: un colegio de Galicia que se apoya en Quiero querer para un proyecto de educación emocional dirigido a jóvenes con discapacidad intelectual. “Los responsables nos han comentado que los libros les resultan de gran utilidad porque, al abarcar todos los ámbitos del ser humano de forma global, les permite completar la formación humana a estos alumnos que tanto apoyo necesitan”, explica.
Una profesora y un psicólogo seleccionan los conceptos que más se adaptan al tema que tratan en un momento determinado y los abordan de manera lúdica, con técnicas de dinámicas de grupo, juegos de roles y actividades complementarias como teatro, cuentos, pintura, imágenes.
“El trabajo en ese centro es una excepción que nos llena de alegría -manifiesta-. Es un resultado que no esperábamos pero que nos alienta a seguir trabajando desde la Universidad en beneficio de la sociedad”.