Pablo Cabrera: "Debemos ampliar nuestra capacidad de análisis para poder innovar"
Encuentro del director de la Academia Diplomática Andrés Bello con los alumnos del MCPC
El diplomático chileno Pablo Cabrera, actual director de la Academia Diplomática Andrés Bello, conversó con los alumnos del MCPC sobre los retos de la comunicación y la diplomacia ante los cambios que afronta la sociedad actual: "las instituciones de hoy van detrás de las personas, necesitan conocer a su público", afirmó. Para Cabrera, la comunicación de organizaciones públicas debe tener en cuenta dos conceptos fundamentales: la transparencia y la capacidad de verificación que otorgan los medios actuales. Esto se observa en movimientos sociales como el de los indignados, que "exigen más información al Estado".
Otro aspecto clave de la comunicación pública reside en ser coherentes con la propia identidad, ya que según explica Cabrera, "cuando uno asume su identidad, puede construir imágenes relacionadas con uno mismo". Hacer otra cosa, en opinión del diplomático chileno, es propaganda. Pablo Cabrera recomendó tres claves para comunicar de modo efectivo: analizar el contexto, ser consistente en los mensajes y generar conversación.
Por otro lado, Pablo Cabrera explicó que la generación actual es "la generación del cambio", ya que se ha pasado "de un mundo de certidumbres a otro lleno de incertidumbres". En su opinión, los comunicadores "tienen aquí una gran labor", ya que "han de ser capaces de descubrir la tradición que se esconde tras los dinamismos del cambio, discernir entre lo cambiante y lo permanente", En definitiva, "debemos ampliar nuestra capacidad de análisis para poder innovar", sentenció.
La diplomacia se mueve en la actualidad en un mundo de abundancia de información, de inflación de datos disponibles, que genera mucho "ruido". Por eso, para el exembajador chileno en países como Rusia, China, Reino Unido o ante la Santa Sede, "el desafío global del diplomático es convertirse en articulador fiable de esa información". Según explicó Cabrera, "la agenda se ha ampliado. Ahora se habla no sólo de paz y seguridad relacionadas con los Estados, sino de derechos de las personas". Por tanto, puede decirse que "las relaciones intergubernamentales han dado paso a las relaciones interpersonales", razonó el diplomático.
Por ultimo, Pablo Cabrera instó a asumir el ADN del diplomático innovador, que supone, según sus palabras: "conocer tu producto (tu país), perseverar en transmitir ese producto (consistencia), poner tu experiencia a su servicio, tener una buena red de contactos y convencimiento del fin que se persigue".