El Padre Brian Kolodiejchuk, postulador de la causa de canonización de la Beata Teresa de Calcuta y el Padre Pascual Cervera, director internacional del Movimiento Corpus Christi, estuvieron en la Facultad de Teología donde impartieron el seminario "Una santa para el año de la Misericordia". Ambos son hijos espirituales de la Madre Teresa, han vivido muy cerca de ella, y hoy -como sacerdotes- dan testimonio de su vida y su carisma.

El P. Brian es el Superior General de los Padres Misioneros de la Caridad y director del "Mother Teresa Center"; autor del libro "Ven, sé mi luz" y de numerosos artículos y publicaciones sobre la Beata Teresa. Por su parte, el P. Pascual es el director del Movimiento Corpus Christi de sacerdotes que viven el carisma de la Madre Teresa en su búsqueda de la santidad sacerdotal. En su intervención, expuso la sorpresa que recibieron cuando, después de morir la  Madre Teresa, conocieron las cartas que había escrito a sus directores espirituales, donde manifestaba el sufrimiento interior que vivía, y mostraba su fe ciega en el amor y la voluntad de Dios. Se descubrió la dolorosa oscuridad y sequedad espiritual en la que vivió la Madre durante cuarenta años, revelando aún más su profunda santidad. "Para poder comprender el significado de la «oscuridad» de la Madre Teresa, hay que entenderla a la luz de su vocación a ser una Misionera de la Caridad", afirmó el P. Cervera.

Explicaron que la futura santa "entendió que el sufrimiento más grande era el de aquellos que se sentían no amados, no queridos, desechados por el mundo. Y su vocación consistía en servir a Dios saciando la sed de amor de todos los hombres, especialmente de los más necesitados".

El P. Cervera concluyó afirmando que "la Madre Teresa puede ser un rico recurso para los teólogos académicos de hoy precisamente porque es un ejemplo contundente y contemporáneo de lo que significa ser santa y mística y, por lo tanto, teóloga".