Carne procesada y cáncer, ¿cuál es la relación?
Expertos de la Universidad valoran las declaraciones de la OMS
El reciente informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) relaciona el consumo de carnes procesadas con la aparición de cáncer colorrectal. En concreto, según el informe elaborado por la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (International Agency for Research on Cancer-IARC), organismo dependiente de la OMS, comer carne procesada como salchichas, embutidos o beicon, puede causar cáncer de colorrectal.
Para elaborar este informe, un grupo de trabajo, compuesto por 22 expertos internacionales de reconocido prestigio sin conflictos de intereses, ha revisado críticamente más de 800 publicaciones, derivadas algunas de sólidos estudios de seguimiento (grupos de miles de participantes seguidos durante muchos años). Su trabajo ha durado cerca de un año y culminó con un encuentro de una semana en la sede de la IARC en Lyon (Francia) para discutir toda la evidencia revisada y decidir en qué grupo se clasifica cada compuesto o agente estudiado.
El resultado ha sido clasificar el consumo de carne roja como probablemente carcinógeno para los humanos (grupo 2A), y el de carne procesada como carcinógena para los humanos (grupo 1). En concreto, el documento advierte de que un consumo diario de 50 gr. aumenta en un 18% el riesgo relativo de padecer este tumor.
Ante estas declaraciones, hemos solicitado a nuestros expertos en Nutrición, Salud Pública y Toxicología una valoración. Estas son sus respuestas:
Alfredo Martínez, catedrático de Nutrición y Bromatología
"Los estudios epidemiológicos de la OMS han permitido concretar que consumir carne procesada puede aumentar el riesgo de padecer cáncer de colorrectal. Este riesgo representa un incremento relativo del 18%, consumiendo 50 gr.al día. Es un incremento pequeño pero la OMS ha pensado que la población debe estar informada. Lo que no quiere decir que, a partir de ahora, no se deban comer carnes procesadas ni que consumirlas seguro va a producir este tumor. Por tanto hay que seguir comiendo con prudencia, variado y diversificado para alcanzar un buen estado de salud. Lo que hay que evitar es el abuso de los alimentos: 50gr. al día serían 350gr. a la semana. Nadie come esta cantidad semanal, por lo que el informe de la OMS da un margen de consumo moderado".
Miguel Ángel Martínez, catedrático en Medicina Preventiva y Salud Pública"La clasificación de la IARC de una sustancia como cancerígena sólo refleja la fuerza de la evidencia (si hay suficiente evidencia o evidencia limitada) y no el grado o magnitud relativa del incremento del riesgo. Dos factores de riesgo pueden estar en la misma categoría (por ejemplo, el tabaco y la carne procesada, ambos en el grupo 1 denominado "cancerígeno para los humanos") con independencia de la magnitud del riesgo que confieren y con independencia también de con cuántos tipos de cáncer se relacionan, de cuántas personas en la población están expuestas o del impacto de la enfermedad causada. Las declaraciones de la OMS no deben preocupar a la población, lo importante es recordar el consumo moderado de los alimentos siguiendo como modelo la dieta mediterránea tradicional. Los riesgos relativos del tabaco para muchos cánceres son una magnitud muchísimo más elevada (2.000 por ciento, por ejemplo) que la de la carne procesada. Pero, como llevamos diciendo hace años, el consumo de carne roja y procesada, debe reducirse, aunque no es necesario eliminarlo de la dieta".
Ariane Vettorazzi, profesora contratada doctora de Toxicología"Para interpretar el comunicado de la IARC es importante diferenciar entre peligro y riesgo. Peligro es la capacidad de una sustancia para inducir cáncer. El riesgo es la probabilidad de que se produzca cáncer bajo unas determinadas condiciones de exposición a ese peligro. La IARC no evalúa el riesgo. Es necesario esperar a las evaluaciones de riesgo que realizan las agencias internacionales reguladoras que tienen en cuenta tanto la exposición real de la población como el balance beneficio-riesgo del consumo de carne. De estas evaluaciones de riesgo, y no directamente de los informes de la IARC, se derivan las recomendaciones a la población. A día de hoy las recomendaciones que existen sobre carne roja y procesada ya aconsejan un consumo moderado debido a otros riesgos conocidos como enfermedades cardiovasculares o diabetes. Es muy probable que los datos del estudio de la IARC no hagan más que reforzar las actuales recomendaciones".
Adela López de Cerain, catedrática de Toxicología y decana de la facultad"La IARC no cuantifica la potencia de un supuesto agente cancerígeno (qué dosis hace falta, y durante cuánto tiempo, para que se produzca el efecto), ni estima la ingesta máxima que no convendría superar, ni establece el máximo admisible o tolerable en un determinado alimento, ni hace recomendaciones dietéticas. En definitiva, no hace evaluaciones de riesgo o balance riesgo-beneficio, que es lo que corresponde a las agencias reguladoras y a los gobiernos. Como consumidores, lo que tenemos que tener claro es lo que ya sabíamos: que la carne roja está en la parte alta de la pirámide alimentaria, que el consumo de carne roja debe de ser moderado, no más de 2-3 veces a la semana, y que no conviene abusar de los tratamientos que generan temperaturas muy altas como la brasa o la parrilla".
Diana Ansorena, profesora titular de Nutrición y Bromatología"Hay estudios de índole epidemiológica que sí han visto una asociación entre el consumo de carne procesada y el cáncer colorrectal; pero hay que ser prudentes con estas declaraciones ya que en los próximos días saldrán nuevos datos que precisarán esta información de la OMS. Al respecto, hasta conocer con detalle ese informe de la IARC, la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) aconseja prudencia y seguir las actuales recomendaciones de salud pública, que indican un consumo moderado u ocasional de no más de dos veces por semana"