El próximo semestre, más del 40% de estudiantes de tercer curso del grado en Asistencia de Dirección – Management Assistance realizará una estancia en el extranjero. Con la finalidad de informar a estos alumnos, resolver dudas y desmentir tópicos de estas estancias, seis alumnas de cuarto compartieron su experiencia en diferentes países durante una sesión titulada “Sharing my exchange experience”. A continuación detallamos algunas de ellas:

 

Fátima Ramos – Suiza (4 meses)

“Vayas donde vayas, ¡deja huella!”

Elegí Ginebra, y Suiza en general, por su aspecto cosmopolita. Se palpa en el ambiente la internacionalidad de esta ciudad en la vida diaria. Sólo en Ginebra hay más de 100 sedes de organismos internacionales. Esto me ayudó a trabajar y tratar con todo tipo de culturas y nacionalidades. Para mí ha sido la mejor experiencia. El programa de intercambio nos enriquece y nos prepara para el mundo laboral, dotándonos de una perspectiva del mundo mucho más amplia. Me llevo muchas experiencias y una amplísima visión intercultural del mundo. Vayas donde vayas, y hagas lo que hagas, tienes que dejar huella.

 

Leire Errazkin – Bélgica (4 meses)

“¡No te olvides de estudiar!”

Si eres uno o una de los afortunados que están a punto de comenzar su estancia en el extranjero, te diría que vivas intensamente cada día como si fuese el último, pero, ¡no te olvides de estudiar! Desde que comencé ISSA supe que quería ir de Erasmus. Sumergirse en otra cultura es una experiencia tremendamente enriquecedora. Me fui a Gante (Bélgica) por ser una de las ciudades más internacionales y universitarias de Europa ¿Lo mejor de mi estancia? La seguridad que uno adquiere en uno mismo y en sus posibilidades al haber superado con éxito todos los retos que supone vivir en un país extranjero lejos de los tuyos, esa sensación de libertad,  la cantidad de viajes hechos, conocer el funcionamiento de otra universidad europea,  desenvolverte en otro idioma y en el fondo… la madurez que adquieres.

 

María Tirador – Canadá (12 meses)

“Quería ponerme a prueba en un país distinto”

Elegí Toronto principalmente porque quería mejorar mi inglés con una estancia larga en un país anglófono y porque me daba la oportunidad de obtener una titulación canadiense. También quería ver la zona norte de Canadá, que es una gran reserva natural y aprovechar para visitar algo del resto de América. El invierno es bastante crudo, pero cuando empieza a hacer calor la ciudad se llena de eventos y festivales. Creo que merece la pena si sabes sacarle provecho.

Ha sido una experiencia con un balance positivo por todo lo que he aprendido y lo que he podido ponerme a prueba estando un año en un país tan distinto y teniendo que buscarme la vida por mí misma.