Motserrat Teixidor, enfermera experta en gestión y decana del Consejo de Colegios de Enfermería de Cataluña y profesora invitada del Máster en Práctica Avanzada y Gestión en Enfermería de la Universidad de Navarra, impartirá la conferencia titulada "Lidera y humaniza el cuidado" en sendos campus del centro académico, en Pamplona y San Sebastián. Las sesiones, abiertas al público, tendrán lugar el próximo 3 y 4 de marzo.

Como un breve adelanto a las conferencias, la experta nos ha concedido una entrevista para explicarnos algunos cambios que la sociedad actual está demandando al profesional de la enfermería:

La profesión de enfermería está cambiando. Las actuales necesidades del contexto sanitario están provocando la demanda de nuevos perfiles profesionales dentro de la enfermería. Estos requieren nuevas cualidades o aptitudes como el de la investigación o  la gestión, ¿cómo considera que en España está reconocida esta evolución de la enfermería?
El sistema sanitario actual está en una situación crucial por la escasez de recursos. Por eso es el momento de que apueste por aquellas figuras que realmente le ayuden a desarrollar proyectos importantes para responder a las nuevas demandas de la sociedad. La formación de hoy en enfermería la posiciona muy bien para liderar  en cualquier ámbito de actuación sanitaria. Existen profesionales con roles avanzados y especialistas que se han esforzado por mejorar su capacidad de intervención tanto de asistencia como de investigación. El sistema reconoce  que la enfermera tiene una pericia como para ejercer nuevos roles como la gestión de la demanda, triaje, liderar en el cuidado, y le otorga la responsabilidad. Lo que falta es que le reconozca esa autoridad de un modo oficial, que profesionalice esas categorías.

¿Considera que hoy en día es necesaria una formación de posgrado para responder a estas necesidades?
La Enfermería puede ayudar al sistema sanitario a responder a las nuevas necesidades de la sociedad donde, además de los hechos, cuentan las emociones, los sentimientos, los valores, donde se ayuda al enfermo de forma integral. Esto requiere de las enfermeras una formación muy potente para desarrollar una competencia cuidadora que dé una repuesta inteligente a los cuidados que necesita la persona, entendiendo su singularidad y ayudándole en su existencia. La formación es fundamental porque hemos de ser capaces de incorporar evidencia científica en nuestra  práctica profesional y ofrecer la mejor atención, para lo que debemos ser creativos en la adaptación del cuidado a la singularidad de la persona.

Es profesora del Máster en Práctica Avanza y Gestión en Enfermería (MPAGE), único posgrado en España que combina estos dos perfiles, ¿qué le parece?
Formar para prácticas avanzadas es muy importante porque hay enfermeras dedicadas a la gestión que les gusta la práctica clínica. El MPAGE da a estas profesionales la oportunidad de  evolucionar y mejorar las prácticas convirtiéndolas en referentes, líderes en el diseño y la aplicación de nuevas y mejores prácticas asistenciales. Además, la formación en gestión es fundamental, porque estratégicamente necesitamos directoras que entiendan el poder del cuidado, la importancia de la visión cuidadora y de desarrollen proyectos institucionales donde creen espacios para la esperanza a través de una excelencia clínica basada en la continiudad de la vida, el acompañamiento, etc. La directora de enfermería es quien tiene el poder de transformar a la institución para promover cuidados innovadores.

Los alumnos del master buscan ser expertos en gestión y práctica avanzada, ¿qué cualidades debe tener un experto en estas áreas?
La enfermera gestora tiene que tener la capacidad de planificar, dirigir, evaluar y, cada día más, de desarrollar e implementar un proyecto de progreso y mejora, inspirado en un paradigma humanista, para que el cuidado se pueda expresar en todas sus dimensiones, ¡nada sencillo! Una enfermera en práctica avanzada  debe una enfermera clínica capaz de ayudar a a incorporar en la práctica cotidiana todas la evidencias científicas novedosas. Además, tiene que tener la habilidad de ayudar, asesorar y reformar los procesos asistenciales para conseguir mejores resultados de la práctica enfermera. Por tanto, deben guiar y ayudar al resto del equipo a desarrollar unos cuidados integrales en colaboración con el paciente y el resto del equipo sanitario. Este tipo de intervención es mucho más reflexiva.