¿Cómo ha evolucionado el «reality» desde «Gran Hermano»?
–El «reality» nace mucho antes de «Gran Hermano». Lo que hizo este programa fue reinventar el formato, al añadirle el componente de concurso. Aunque esta reinvención afecta a todos los géneros televisivos, quizá se note más en el «reality», que es el más camaleónico de todos.

¿Qué espacios tienen más éxito en la actualidad?
–En la tendencia televisiva del momento, predominan los «realities» con un elemento de «coaching» (autoayuda). Se trata de programas que tienen un aspecto positivo, en contraposición con el «reality» tradicional, que se ha asociado a una imagen más negativa de la televisión. También proliferan los de famosos, viajes, o aquellos que poseen un componente solidario.

¿A qué se debe el éxito de este formato?
–Aunque ser «reality» no garantiza el éxito, predominan en las cadenas de todo el mundo porque la audiencia se siente identificada con los participantes (alguien como yo va a la televisión y triunfa). Algunos también tienen un componente de morbo, lo que  proporciona buenos datos de «share». Por ello, muchas veces las televisiones los anteponen a otros espacios con más vocación de servicio público.

¿Se prefieren «realities» morbosos o más blancos?
–La tendencia general es que los «realities» más oscuros logran más audiencia, pero empeoran la imagen de la cadena. Los más blancos, como los de autoayuda o viajes, resultan muy interesantes desde el punto de vista del «target», ya que éstos cuentan con una audiencia fiel, que, además, es muy atractiva desde el punto de vista publicitario, pues generalmente se trata de un público con un nivel económico y sociocultural alto.