A fecha de hoy, existen 5.853 montañas rusas operativas repartidas por todo el mundo. El país con mayor número de estas atracciones es China con un total de 1.843. Le sigue Estados Unidos con 914 y después, Alemania, Francia, Japón, Reino Unido y Rusia con unas 200 cada uno. Las demás se reparten por el resto del mundo, siendo Europa el continente donde quedan la mayoría.

De estas casi 6.000 montañas rusas, la sexta parte están clasificadas como extremas. Esto significa que se quedan cerca de cumplir la regla 4-4 de diseño en la que no se pueden superar aceleraciones de 4 g durante más de cuatro segundos. Dicha regla y otras más de seguridad las recogen normas tales como la estadounidense ASTM-F2291 o la Europea ISO 17842. Para que el lector se haga una idea, la montaña rusa Shambhala en Port Aventura llega en varios puntos a aceleraciones de 3,8 g.

La fabricación de estos titanes mecánicos lleva a las empresas constructoras a superar sistemáticamente los límites estructurales y dinámicos que exigen estas atracciones. Los conceptos más rápido, más alto o más intenso son superados en cada nueva coaster (del término inglés rollercoaster).

Actualmente, la montaña rusa más alta del mundo es Kingda Ka en el parque de atracciones Six Flags Great Adventure, situado en el estado de New Jersey a poco más de cien kilómetros de la ciudad de Nueva York. La altura de este coloso es de 139 metros, prácticamente lo mismo que la torre Agbar de Barcelona. Kingda Ka es también la más rápida del mundo alcanzando una velocidad de 206 kilómetros a la hora (en realidad, la más rápida es Formula Rossa, en el parque Ferrari de Dubai, con 240 kilómetros a la hora, pero actualmente no está operativa).

Durante la década de los noventa y hasta el año 2010, se puso de moda construir montañas rusas con muchas inversiones. Se considera inversión al elemento del recorrido que hace que la vertical gire más de 135 grados y vuelva a la posición vertical. Para ilustrarlo, el famoso ampersand de Shambhala no está considerado inversión porque, aunque se gira más de 90 grados, no llega a los 135. En esta categoría, el récord lo tiene Smiler en Alton Towers (Reino Unido) con catorce inversiones. Es destacable mencionar a Colossus en Thorpe Park (también en Reino Unido y muy cerca de Londres) con un total de diez inversiones teniendo lo que se denomina un heartline roll de cuatro inversiones seguidas.

La mayoría de estos récords se superarán en 2025 con la inauguración del parque de atracciones Six Flags Qiddiya junto a Riad en Arabia Saudi. Este parque contará con Falcon’s Flight, la montaña rusa más rápida (alcanzará 250 kilómetros a la hora), más alta (ascenderá por una colina de 195 metros y tendrá un camelback de 158 metros constituyendo el elemento estructural más alto del mundo en una montaña rusa) y más larga del mundo con un recorrido de cuatro kilómetros y 250 metros.

Nuestro país, si bien no tiene una gran cantidad de montañas rusas (con un total de 55 ocupamos el puesto número 23 del mundo), podemos disfrutar de varias montañas rusas de récord: Red Force (en Port Aventura) es la más alta de Europa (112 metros) y también la más rápida de nuestro continente (180 kilómetros a la hora); Dragon Khan, que en el momento de su inauguración ostentaba el récord de montaña rusa con más inversiones (ocho) y el looping más alto del mundo con 35 metros; Shambhala, que en el momento de su inauguración fue la montaña rusa más alta de Europa con 76 metros de altura y una caída de 78 metros; y Batman Gotham City Escape, que fue la primera montaña rusa de Europa con treslanzamientos.

Cabe mencionar que en Port Aventura se encuentra una de las instalaciones hidráulicas más complejas de España: el motor de la montaña rusa Furius Baco, una instalación que utiliza aceite a muy altas presiones y que sin duda es destacable. En un apartado más discreto, pero no por ello menos importante, también se encuentra en nuestro país una de las montañas rusas más antiguas del mundo: la Montaña Suiza del Monte Igeldo de San Sebastián Donostia. Inaugurada en 1928, ocupa el puesto número 16 (la cuarta de Europa) como montaña rusa operativa más antigua del mundo.