Publicado en
El Confidencial
Germán López Espinosa |
Catedrático de Contabilidad de la Universidad de Navarra y del IESE
Aunque la elección de Trump como presidente de EE.UU. ha impactado negativamente en los bancos españoles, podemos decir que en estos momentos, la banca está viviendo un momento dorado. La llegada de Trump prevé un horizonte de incertidumbres con una posible inestabilidad en las políticas comerciales y el temor a un aumento de los tipos de interés en EE.UU derivado de una futura política fiscal expansiva que podría fortalecer el dólar frente al euro. Un dólar fuerte y políticas menos favorables para la Unión Europea serían un desafío adicional para los bancos de la Eurozona.
Actualmente, la Eurozona alberga 47 bancos cuya capitalización de mercado supera los mil millones de euros. Lidera esta lista el banco italiano Intesa San Paolo, con una capitalización de 72.907 millones de euros (M€), seguido muy de cerca por el gigante español Santander, con 70.878 M€. Sin embargo, estos valores aún están lejos de los pesos pesados internacionales: el banco de inversión estadounidense JP Morgan cuenta con una capitalización de 582.028 M€, Bank of America con 299.824 M€, y el chino Industrial and Commercial Bank of China con 268.346 M€. Teniendo en cuenta la importancia del sector bancario en la Eurozona dada la inexistencia de un mercado de capitales único, sería deseable estudiar cómo la regulación, supervisión, protección al consumidor, costes legales y otros factores están afectando al valor de nuestros bancos.
Al analizar los resultados del tercer trimestre, la situación de los bancos de la Eurozona resulta alentadora. La Rentabilidad sobre Fondos Propios (ROE) media anualizada es del 14,7% en bancos con capitalización superior a 1.000 M€, superando el 15,2% más del 50% de estas entidades. Los bancos españoles han tenido un buen trimestre: BBVA lidera con un 19,2%, seguido por Bankinter (18,3%), Caixabank (17,4%), Sabadell (14%), Santander (13,8%) y Unicaja (9,3%).
Creación de Valor y Rentabilidad para el Accionista
Por lo que respecta a la generación de valor para el accionista, estimando la diferencia entre el ROE y la rentabilidad requerida por el accionista (Cost of Equity), BBVA destaca a nivel europeo. En la base de datos, Capital IQ, figuraría una generación anual de valor para sus accionistas de 4.684 M€ teniendo en cuenta una rentabilidad requerida del 12%, que es elevada, puesto que, por ejemplo, en la página web de Aswath Damodaran figura una rentabilidad requerida en el año 2024 para los bancos regionales de Estados Unidos de un 6%. La rentabilidad requerida, es una estimación, y depende de muchos factores. Cuantos más factores de riesgo se incorporen al modelo para estimar la rentabilidad requerida mejor será éste, siempre que los factores capturen adecuadamente el riesgo. Tradicionalmente, en las empresas no financieras se ha utilizado el modelo de tres factores de Fama-French (1993) y otros adicionales, pero el citado modelo no incorporaba empresas financieras para su estimación puesto que su nivel de apalancamiento es muy diferente al resto de industrias, por lo que parece más razonable añadir factores específicos de la industria bancaria para su estimación.
¿Qué hay del Riesgo Crediticio y la Relación Precio-Valor Contable?
En cuanto al riesgo crediticio, el nivel de préstamos improductivos (Nonperforming loans) en la Eurozona varía entre el 0,42% y el 6,75%, con un promedio del 2,5%. Esto sugiere una situación estable y no preocupante. La relación Precio-Valor Contable (Price-to-Book) también muestra signos de mejora, con una media de 0,87, ya que el mercado está premiando la política de dividendos de los bancos. Los bancos son empresas con negocios muy maduros y son atractivos para el inversor en la medida que ofrezcan remuneraciones interesantes.
Los Gigantes del Beneficio Trimestral
Entre los bancos de la Eurozona, Santander destaca con el mayor beneficio trimestral, alcanzando los 3.250 M€, seguido por BNP Paribas con 2.868 M€ y BBVA con 2.628 M€.
Retos en el horizonte
A pesar del panorama positivo, se prevé que en los próximos trimestres los ingresos por intereses disminuyan debido a las recientes reducciones de tipos de interés en junio, septiembre y octubre. Además, la llegada de Trump al poder también trae, como hemos dicho al principio, algunos nubarrones en el horizonte.
Aunque con una posición sólida en el presente, el sector bancario español se enfrenta a la necesidad de gestionar su negocio en un entorno de elevada incertidumbre. No obstante, su situación actual es lo suficientemente buena como para permitirle anticiparse a los posibles obstáculos que puedan surgir y el efecto Trump puede ser, en parte, una sobrerreacción del mercado ante la incertidumbre que se genera en Europa, y particularmente, en España.