Los resultados del 22-M tienen varias lecturas. Por eso, podrían calificarse de poliédricos. Se pueden analizar en términos económicos, de equilibrio de poder territorial, cohesión nacional y aparición de posibles nuevas alternativas políticas. Analicemos cada una de ellas.

Economía: un Gobierno aún más débil. El Gobierno de Rodríguez Zapatero aparece más débil, perdidas las elecciones por el PSOE en número de votos y concejales; con gobiernos del PP en las comunidades autónomas donde gobernaba con más mayoría y vuelcos en Castilla-La Mancha, Baleares, Extremadura, Cantabria, ¿Canarias?, ¿Aragón?, ¿Asturias?, Sevilla, ¿Barcelona? ¿Qué van a pensar los inversores internacionales y los dirigentes europeos? ¿Pensarán los primeros que gobernar será más difícil y aumentarán el diferencial de la deuda soberana española? ¿Pensarán los que mandan en la zona euro que el Ejecutivo no será capaz de hacer las reformas y le presionarán más? ¿Se enrocará el utópico mitinero electoralista ZP en la izquierda o recobrará la sensatez reformista? En unas semanas se verán las consecuencias.

El presidente ha cometido un doble error. Primero, su renuncia anticipada a la reelección no ha permitido remontar al PSOE; segundo, esa decisión le dificulta adelantar las elecciones. Necesita dar tiempo a las primarias y al candidato que salga de ellas. Todo ello con los inversores y Europa vigilando. Espera un agonizante periodo económico hasta 2012, mitigado por el turismo veraniego.

Equilibrio territorial

El equilibrio del poder territorial: a favor del PP. El PP ha avanzado en muchos lugares a costa del PSOE. Es el desgaste natural de una mala gestión de la crisis económica. La pregunta es: si no hay elecciones anticipadas, a la espera de las primarias socialistas, ¿cuál será el papel de una oposición ganadora?

La lógica económica sería que el Gobierno pidiera la ayuda de la oposición para acordar reformas. El PP se verá ante el dilema de aparecer como poco solidario al negarse o el de corresponsable de las medidas impopulares. La única alternativa será escaparse de la trampa saducea pidiendo un adelanto electoral, que será difícil obtener porque pilla al PSOE al traspié.

Cohesión nacional

Cohesión nacional: Madrid, rompeolas de las Españas y Bildu, ¿rompe España? El resultado de estas elecciones tiene muchas lecturas. Una de ellas es el resultado de UPyD en Madrid, que tendrá grupo en la comunidad, la capital y muchos ayuntamientos.

Otra es que las listas de Bildu han sido muy votadas en Euskalerría. Rosa Díez (Vascongadas) ha demostrado que su oferta ha calado como españolista y como alternativa a las dos fuerzas políticas. ¿Cuál de las dos ofertas ha pesado más? Madrid ha dicho que cree en España, en su existencia. Madrid ha sido una vez más rompeolas de las Españas.

San Sebastián ha votado con fuerza a Bildu (Euskalerría), soberanista. En el conjunto del electorado nacional es poco significativo, pero el Tribunal Constitucional les ha dado la posibilidad de entrar en los consistorios vascos. ¿Serán estos electos prudentes o darán ocasiones para que los magistrados se arrepientan?

Nuevas alternativas

Nuevas alternativas: el 15-M, ¿un movimiento permanente? La decisión de la asamblea de la Puerta del Sol es permanecer al menos una semana más; en la plaza de Cataluña, hasta el 15 de junio. Parece que tienen deseo de permanencia. ¿Lo conseguirán? Empezamos a conocer algunas caras del movimiento de protesta. Siempre que aparece una alternativa necesita encarnarse. Sin líderes, no hay organización.

Si aparecieran podrían ser una oferta electoral diferente al actual panorama. De aquí a las elecciones generales hay unos meses. Meses económicamente duros, con una situación del paro juvenil que dará alas a los indignados; especialmente si los medios de comunicación siguen alentándolos. Pero para ello será necesario que se organicen, y eso no es fácil.

En resumen, unos resultados poliédricos, en los que el PSOE pierde y el PP gana, pero que hay algo que se está moviendo en otras alternativas.