Elvira Martínez Chacón, Doctora en Cincias Económicas, Universidad de Navarra
No es un consuelo
Acaba de publicarse la Encuesta de Población Activa (EPA) referida al cuarto trimestre de 2010, que nos permite hacer una valoración, eso sí apresurada, de la situación del mercado de trabajo en Navarra.
No es un consuelo, no puede serlo, afirmar que la tasa de paro es una de las más bajas de España y un 40% por debajo de la media. Y no puede serlo porque hay 35.700 personas que buscan trabajo y 1.500 de ellas buscan su primer empleo. ¿Cómo ha sido el último año en el mercado laboral de Navarra?
La población en edad laboral aumentó en 1.400 personas pero fueron sólo mil lasque acudieron al mercado laboral. A pesar de esta baja participación, el número de los ocupados se redujo en 2.500 personas y 3.500 personas aumentaron las cifras de paro, con mayor incidencia entre los hombres. Se nos hace más familiar su expresión en tasas y éstas son 59,8 % la de actividad y 11,6 % la de paro, una cifra, esta última, que hace un año era del 10,5%.No son buenos datos, aunque la situación, repito, siga siendo menos negativa que en España. Más de la cuarta parte de la población contratada lo está con contratos temporales, un porcentaje muy similar al valor medio de España. Es precisamente esta clase de contratos los más fáciles de rescindir, son los que crean mayor inseguridad en el trabajador y hacen más difícil la toma de decisiones a largo plazo.
¿Qué perfil tiene la población en paro? Todas las situaciones son duras: entre los jóvenes porque ven retrasarse el momento detener una vida activa; entre los mayores, porque les resulta muy difícil reincorporarse a un puesto de trabajo y suelen tener una familia que muchas veces depende de su sueldo. Más de la tercera parte son parados de larga duración, es decir, llevan más de un año buscando empleo.
La reforma reciente del mercado laboral no ha tocado aspectos muy importantes, que harían más atractiva la creación de empleo sano, como son el ámbito de negociación de los convenios colectivos o la reducción de las cotizaciones sociales a cargo del empleador; esto explica el escaso o nulo efecto que está teniendo en la creación de empleo. Se sabe, por otra parte, que, en la situación actual, para que el sistema productivo genere empleo hace falta una tasa de crecimiento en torno al 3%y eso no se vislumbra en el horizonte. De manera que la publicación de las cifras deja un sabor amargo en el analista.