17 de junio de 2009
Ciclo de conferencias
VI JORNADAS BARROCAS EN CORELLA
Casas y linajes. Aspectos menos conocidos de la Corella Barroca
D. Esteban Orta Rubio
Historiador. Sociedad de Estudios Históricos de Navarra
El conferenciante, Esteban Orta, ha querido destacar algunos aspectos menos conocidos de la ciudad de Corella durante el Barroco. Principió tratando del sistema de murallas y puertas que rodeaban la población hasta bien entrado el siglo XIX y que, si bien no quedan vestigios físicos en la actualidad, subsisten, además de la documentación, ciertos topónimos y calles -Muro, Tajadas, Fortaleza- que ayudan a localizarlas. Cinco eran las puertas que se abrían en la muralla: Puerta de Alfaro, Puerta de San José o de Murillo, Puerta de San Miguel o de Las Heras, Puerta del Sol o de Fitero, y Puerta de Tudela. En 1819 ordenó el ayuntamiento la demolición de los últimos restos, para evitar desgracias y dar “hermosura a la población”.
Posteriormente y en otro apartado, puso en evidencia como Corella se convierte durante estos siglos en un centro comercial de redistribución y destacó la íntima conexión que se da entre el hecho anterior y la aparición de importantes linajes (Sesma, Miñano, Morales, Escudero, Virto, …) que se enriquecen y alcanzan relevancia política y social a través de este comercio, muchas veces ilícito.
La tercera parte la dedicó al análisis del ascenso y posterior evolución de estas élites. Finalizando con la aproximación a la trayectoria vital de dos personajes poco conocidos y valorados todavía. El primero Don Pedro de Baigorri (1593-1670) que consiguió el ascenso social y posterior título de Caballero de Santiago, a través de la carrera militar. Su vida, azarosa e incluso turbulenta, alcanzó su culmen al ser nombrado, en 1652, Capitán General y Gobernador de Buenos Aires. Incluso aspiró al cargo de Virrey, pero fue un espejismo pues acusado de contrabando ante el Consejo de Indias, se le embargó su hacienda, se le juzgó y condenó al pago de una cantidad muy abultada.
Murió en Buenos Aires, sin medios económicos para volver a Corella y ser enterrado en el convento de monjas de la Encarnación, que él mismo, con sus donaciones, había fundado.
La otra figura es doña Isabel Virto y Luna (1663-1750), personaje femenino que se sitúa en las décadas finales del Barroco. Quedó viuda, con apenas 20 años; mas, su posterior casamiento con Antonio Lecumberri, ganadero tudelano de reses bravas, la introdujo en el mundo del toro. Puso de manifiesto Esteban Orta, siguiendo las recientes investigaciones de Ramón Villanueva, el papel decisivo que jugó esta mujer en el interesante mundo de las ganaderías navarras. Tras la muerte de su segundo marido, y durante cerca de cuarenta años, se mantuvo al frente de la ganadería más destacada de Navarra la de “Viuda de Lecumberri”. A su muerte, la ganadería fue adquirida a sus herederos por Francisco Javier Guendulain, pasando, en el siglo XIX, a poder de Nazario Carriquiri, dando origen a los famosos toros “Carriquiri”.
Reconstrucción del recorrido de la muralla de Corella
La conferencia tuvo lugar en una de las salas del Museo Arrese de Corella, antigua capilla del convento de la Encarnación