La pieza del mes de junio de 2017
EL LIBRO DE ORO DE NAVARRA A S. S. EL PAPA PÍO XII
Francisco Javier Zubiaur Carreño
Cátedra de Patrimonio y Arte navarro
1950 fue el Año Santo “del gran retorno y del gran perdón”, declarado por el Papa Pío XII en un horizonte cargado de tensiones y con las heridas de la Segunda Guerra Mundial todavía abiertas. Un mensaje de paz subyace en este Jubileo de todos los hombres y también de los más alejados de la fe cristiana, no obstante la dificultad de los católicos del Este de Europa en acudir a Roma. El momento en que Su Santidad Pío XII proclamó al mundo entero, representado en la Plaza de San Pedro por quinientos mil fieles y 622 obispos, el dogma de la Asunción de María, fue definido como “la mejor predicación del siglo”.
Navarra no quiso permanecer indiferente ante este gran acontecimiento religioso que se presentaba como ocasión para la reconciliación, la conversión y la penitencia sacramental. Por eso, la Diócesis de Pamplona, de conformidad con el pasado cristiano de Navarra, quiso ofrecer al Santo Padre un testimonio de su fe viva materializado en un álbum personalizado que recogiese la memoria de su trayectoria religiosa a través de los siglos. Antonio Ona de Echave, párroco de San Lorenzo (Pamplona), había iniciado los trabajos conducentes a lo que con mayor propiedad se llamaría Libro de Oro de Navarra, a cuya iniciativa se sumó gustosa la Diputación Foral al asumir su iniciativa como propia y que, una vez confeccionado, entregaría a Su Santidad una comisión de diputados forales desplazada a Roma presidida por el Obispo de la Diócesis, Mons. Enrique Delgado Gómez, y formada por Jesús Larráinzar Yoldi, Carmelo del Villar Callén y José Ángel Zubiaur Alegre, mi padre, a quien la Corporación Foral, por Acuerdo de 30 de junio de 1950, había designado para que organizase y dirigiese, contando con las colaboraciones y ayudas necesarias, la labor de confección de dicha obra. En ella, reza el Acuerdo de la Diputación, “se recogerían las actividades religiosas de este Antiguo Reino y las aportaciones de sangre y otros bienes con que tanto sus hijos como las Entidades del mismo han contribuido siempre a la causa de la catolicidad de la Iglesia”.
Portada del original en plata (Talleres de Arte)
(Fotografía de Francisco Zubieta)
El Libro se concibió como ejemplar único de acuerdo a su especial significación, una imitación de códice eclesiástico manuscrito con letra gótica y miniado a la manera tradicional conteniendo sesenta hojas de pergamino encuadernadas a la romana con cubiertas de plata sobredorada y con formato apaisado. En la parte superior de la tapa campeaba el escudo de Navarra con esmaltes, en el centro el de Su Santidad, abajo el de España, y a los lados las imágenes de San Fermín y San Francisco Javier, patronos de nuestra Comunidad, protegidos bajo una triple arquería de arcos góticos conopiales a los lados flanqueando uno central del tipo carpanel trilobulado que cobija la dedicatoria. Composición toda ella orlada por un fino sogueado recorrido exteriormente por una cenefa de hojas con suave ritmo curvilíneo. La leyenda decía: “A Su Santidad el papa Pío XII, el antiguo Reino de Navarra”. En el reverso iban el escudo de Navarra, el del obispo diocesano a su derecha y el de Pamplona a su izquierda, dentro de rosetones cuadrilobulados de estilo gótico, de mayor diámetro el de Navarra, centrados en un panel surcado en relieve por líneas convergentes que liberan rombos en cuyo interior se habían insertado rosetas cuadripétalas de sabor islámico, todo el panel recorrido exteriormente por las cadenas del Reyno, un cordón y una cenefa con una sucesión de tallos vegetales formando suaves arabescos de aliento gótico. Por encima del escudo navarro las palabras AÑO SANTO y por debajo el año del jubileo: 1950.
En las páginas interiores se reflejaba la historia de Navarra en su vida religiosa, tanto en el pasado como en el presente, así como las aportaciones de las instituciones navarras al desarrollo religioso y social. En el índice figuraban los siguientes capítulos paginados con números romanos:
La Diócesis de Pamplona |
I |
La Catedral |
IX |
Catálogo de Obispos de esta Diócesis |
XI |
Estadística actual de templos, ermitas, Cofradías, Asociaciones piadosas, etc. |
XIV |
Signo vocacional de Navarra |
XXI |
Secretariado de Misiones |
XXIII |
Secretariado Catequístico |
XXV |
Secretariado de Ejercicios Espirituales |
XXXI |
Acción Católica |
XLII |
La Congregación Mariana |
XLVIII |
Las Romerías |
LIII |
La Cruzada Española |
LXII |
La Enseñanza en Navarra |
LXIX |
Acción Social |
LXXVII |
Institución Príncipe de Viana |
LXXXI |
Santuario de San Miguel |
CXI |
La Beneficencia |
CXIII |
El volumen no presentaba los créditos usuales en los libros impresos sino que se configuraba como memoria de una colectividad, la navarra, aunque en su elaboración contribuyeron numerosas personas, unas en el plano literario o aportando informaciones, y otras en el artístico, cuyos nombres conocemos por ser mencionados en la documentación oficial.
Hubo colaboraciones desinteresadas como las de los sacerdotes Teodosio Aoiz, Agustín Arbeloa Egüés, Alejandro Maisterrena Etuláin, Casimiro Saralegui Lorea, José Goñi Gaztambide, Jesús García Mendiri, la comunidad de padres salesianos y jesuitas, además del ya nombrado Antonio Ona de Echave. Entre los colaboradores no eclesiásticos, escribieron en él Dolores Baleztena Ascárate, Javier Donézar Sarasíbar, José Esteban Uranga Galdiano, Fermín Mugueta Sarasa, Francisco López-Sanz Latasa, Manuel Laguna Buitrago y José Ángel Zubiaur Alegre. Facilitaron datos económicos las dos Cajas de Ahorro navarras (Municipal y Provincial) y la empresa Pedro Mayo.
La parte artística es sin duda para nosotros la más interesante, puesto que en el Libro de Oro participaron orfebres, amanuenses, dibujantes y encuadernadores. Al frente de estos profesionales y llevando la dirección artística de todos ellos y de la distribución de las páginas del Libro, con la consiguiente responsabilidad y trabajo de ornamentación, estuvo Leocadio Muro Urriza, afamado ilustrador por su seriedad y pulcritud en el trabajo, quien, además, realizó tareas de dibujante, todos ellos contratados al efecto. El total de gastos, lo que hoy llamaríamos producción del libro, ascendió a 61.710 pesetas.
Participaron como dibujantes el sacerdote Nicasio Albéniz Armendáriz, Leocadio Muro Urriza, Antonio de Assas y Zabala, José Félix Erice Echaide, los hermanos Juan María y Juan Luis Cía Gaetano, Pedro Lozano de Sotés, Alfredo Surio de la Cuesta e Ignacio Gatell. José Ayestarán facilitó los pergaminos por medio de la empresa de curtidos de su nombre en la calle Calderería de Pamplona, los Talleres de Arte, de Madrid, diseñaron y elaboraron las cubiertas, y José Azurza se encargó de ordenar las hojas de pergamino del libro en rama para su encuadernación con las tapas de plata y cierres en los citados Talleres madrileños, que llevó personalmente a la capital el secretario particular del diputado Zubiaur, Pedro Erro Galar.
Portada de la copia en pergamino (Encuadernaciones Azurza)
Contraportada de la copia en pergamino (Encuadernaciones Azurza)
Portada (Fotografía de Francisco Zubieta)
Se conservan en las bibliotecas de Navarra al menos tres ejemplares de tales copias fotográficas en blanco y negro del álbum original: dos en el Archivo Real y General y una en el Monasterio de Leire. La reproducción fotográfica, realizada por Francisco Zubieta Vidaurre, en la que centraré mi análisis por ser la de libre acceso que nos permite imaginar la riqueza del manuscrito original existente en el Vaticano, lleva por título el que figura en la tapa, A SU SANTIDAD EL PAPA PIO XII, EL ANTIGUO REINO DE NAVARRA, y, en la portada, al comienzo del libro, también en letras mayúsculas de estilo gótico, ESTE ES EL LIBRO DE [en nexo] ORO DE NAVARRA [esta palabra en caracteres mayores], PORQUE RECOGE EL ESPÍRITU CATÓLICO DEL ANTIGUO REINO EN AMOROSO HOMENAJE AL SANTO PADRE. El diseño de esta página es hermosísimo, seguramente miniada por Muro Urriza por la elegancia y estilización de los caracteres y de las figuras representadas. En ella un caballero de luengo escudo con el águila real emblema de Sancho VII el Fuerte rey de Navarra, con lanza en ristre y penacho del yelmo al viento es representado sobre cabalgadura elegantemente vestida con gualdrapa bajo la leyenda NAVARRE . SANCIUS . DEI, todo ello en el interior de la letra capitular E, que da comienzo al texto pulcramente definido en varios renglones, las palabras de las cuatro bandas inferiores separadas por puntos, y en gran parte orlado con cenefas vegetales y una escuadra del lado del lomo en la que se enrosca un gracioso dragón de rabo estilizadísimo y cuya boca exhala una llama caprichosamente tornada en hojas.
Ornamentación del corte de la copia (Encuadernaciones Azurza)
Las dimensiones en centímetros de la réplicas en copia fotográfica son de 16 de alto por 25 de ancho y 7 de grueso, guardada cada una de ellas dentro de un estuche ad hoc de cartón forrado de tela con cinta de seda para facilitar la extracción del ejemplar. La encuadernación de las réplicas es en pergamino con cubiertas de tapa dura y corte ilustrados. Aquellas exhiben un fino trabajo de repujado previo aplanado de la piel de pergamino mediante cincel, asentado del oro y policromado, y repiten los motivos y adornos de las de metal pero en este caso grabados a rueda sobre la piel. Y el corte de la parte delantera, opuesta al lomo, es a teja canal y en los lados superior e inferior recto. Su ornamentación es de gran belleza pues sobre fondo dorado se ha hgrabado una sucesión de medallones lobulados encabalgados formando rosetas en alternancia de azules con rojas rellenando los espacios libres con cruces patadas de varios palos y flores de lis. Queda cobijado el corte por la ceja de las tapas que le sirven de realce.
Dedicatoria (Nicasio Albéniz)
(Fotografía de Francisco Zubieta)
Tras la cubierta del Libro, que en su cara interior lleva guardas de raso blanco ornamentado con flores y tallos vegetales, se incluye una portadilla miniada y rotulada en letra gótica por Nicasio Albéniz (cuya firma queda disimulada en el ángulo inferior derecho del lector), y sobre cartela dorada la dedicatoria al Sumo Pontífice: Navarra al / Vicario de / Jesucristo. Este texto, situado en el medio, queda bajo el emblema del sucesor de Pedro, las dos llaves del reino del Cielo sobre montadas por la tiara papal, y bajo aquella, al centro igualmente, el escudo doblemente laureado de Navarra acompañado a cada lado por dos jinetes a caballo, que cabriolean, con sus gualdrapas y todo, y los caballeros blandiendo espada y con escudo, sus cabezas tocadas con ornato de plumas, todo este conjunto enmarcado por el guardapolvo de un retablo decorado en los laterales por figuras de santos de la Iglesia, destacándose todo él sobre un fondo de tallos, palmetas y flores en abigarrada y bien delineada composición. Las guardas de raso se repiten en el interior de la contracubierta. Como se ha explicado, en la edición replicada del original, las cubiertas de plata han sido sustituidas por otras de pergamino, pero las originales eran de plata de ley, con fino trabajo repujado y cincelado, dorado con oro fino y con escudos y motivos decorativos esmaltados, más cantoneras y cierres para su mayor prestancia y seguridad. Su elaboración fue dirigida en los Talleres de Arte, de Madrid, por el sacerdote, escultor, pintor y orfebre liturgista Félix Granda Buylla. La encuadernación de las réplicas fue realizada en edición de lujo por el encuadernador José Azurza, conocido artesano con negocio en San Agustín 38 de Pamplona, que supo elevar su oficio a categoría de arte.
Diseño de página
(Fotografía de Francisco Zubieta)
El interior del Libro manuscrito a plumilla en letra gótica cursiva, con cenefas, adornos y viñetas a pincel y varias tintas previo desengrasado del pergamino con polvos de talco, presenta en las páginas de texto una composición a doble columna con márgenes justificados (con ayuda de puntos corridos) y comienzo de párrafo con sangrado de varios espacios iniciado con letra capital inserta en un motivo referido al tema de que se va a tratar. Cada hoja del manuscrito presenta invariablemente una cabecera consistente en una cenefa corrida adornada por arabescos variados, generalmente entrelazos vegetales o filacterias combinados con figuritas humanas, guerreros, ángeles, animales de un imaginado bestiario (por ejemplo cabezas humanas con cuerpo de reptil cuyo rabo se mezcla con la vegetación) o capullos alados distribuidos en torno a un motivo central que suele ser un jarrón, una cruz en cartela, una casa, el anagrama IHS [Iesus Homo Salvator] o las palabras PIVS XII - P. M. [Pío XII Pontifex Maximus] conforme al deseo de personalizar el libro en la figura de su destinatario, todo ello evocando la decoración a candelieri del Renacimiento. Las dos columnas de texto están separadas por un calle o medianil en la que se ha introducido una banda vertical que da equilibrio al conjunto y se decora de manera imaginativa en forma de eje del que brotan hojas como si se tratase de un tallo o en el que se enrosca una filacteria contraponiendo estéticamente la sinuosidad a la verticalidad, en clara evocación de los marcos de encuadramiento de los retablos barrocos. Esta banda presenta remates en forma de animalillos, guerreros, pájaros, grifos, o la Cruz como motivos representativos.
Ejemplo de viñetas
(Fotografía de Francisco Zubieta)
Viñetas de Muro Urriza
(Fotografía de Francisco Zubieta)
Viñeta de Lozano de Sotés
(Fotografía de Francisco Zubieta)
El texto va acompañado de numerosas viñetas de formato rectangular, o cuadrado, de monumentos, figuras alusivas, objetos litúrgicos, composiciones de figuras, interiores de templos, vistas de poblaciones, edificios dedicados a la enseñanza o al cooperativismo, sanatorios, emblemas como el de la Institución Príncipe de Viana, etc. Asimismo tablas con estadísticas numéricas (que obligan a quebrar el párrafo), otros datos dentro de cartelas de bordes curvos o enmarcadas por cíngulos acabados en borlas, con sabor neo-medieval. En el dibujo de algunas viñetas es fácil de identificar la mano de Leocadio Muro Urriza, como es el caso de los dibujos que cierran el libro: dos ángeles músicos de estilizado canon y limpio contorno que tocan trompetas sobrepuestas sus figuras a dos círculos, seguramente de cromatismo audaz que no es posible apreciar en esta copia fotográfica en negro, en uno de los cuales (el izquierdo) se inscribe el escudo del Papa Pío XII (una paloma con ramita de laurel al pico posada en un promontorio sobre las aguas símbolo de la vida tras el diluvio universal) y en el opuesto la inscripción AÑO / SANTO / 1950, el año del perdón, como colofón del Libro de Oro. Otras viñetas son clara autoría de Pedro Lozano de Sotés, aquellas referidas a los requetés heridos en el frente de combate o el romero penitente ante el santuario de Ujué, en las que destacan el firme modelado y la acusada perspectiva de los motivos representados. Pero, en general, no es fácil distinguir el trabajo de otros autores, la mayoría de ellos dedicados a la ornamentación.
La pulcritud del conjunto pone en evidencia la controlada dirección artística del proyecto coordinado por Muro Urriza, al que creo debe atribuirse la mayor parte de la rotulación del texto en caracteres góticos, pues la rotulación de pergaminos era una de sus especialidades, y, desde luego, sobresale el aire historicista del libro en su conjunto.
BIBLIOGRAFÍA:
Acuerdo de la Diputación Foral de Navarra de 30 de junio de 1950 por el que designa al diputado foral que suscribe [José Ángel Zubiaur Alegre] para que “organice y dirija, contando con las colaboraciones y ayudas que crea necesarias la labor de confección de la obra de que se trata [Álbum o Libro de Oro], dando cuenta periódica a esta Diputación, a los efectos de los acuerdos oportunos, de la marcha de los trabajos”. (Archivo JAZA).
Archivo Real y General de Navarra. A su Santidad el Papa Pio XII, el antiguo Reino de Navarra [:Año Santo 1950:éste es el Libro de Oro de Navarra, porque recoge el espíritu católico del antiguo Reino en amoroso homenaje al Santo Padre]. [Pamplona] : [Diputación Foral de Navarra], [1950?]
AUÑAMENDI EUSKO ENTZIKLOPEDIA. FONDO BERNARDO ESTORNÉS LASA. Donostia-San Sebastián, Eusko Ikaskuntzaren Euskomedia Fundazioa, 2002-2013.
GRAN ENCICLOPEDIA NAVARRA. Pamplona, Caja de Ahorros de Navarra, 1990, 11 vols.
MURUZÁBAL DEL SOLAR, J. M., “Leocadio Muro Urriza”, en V.V.A.A. Pamplona. Año 7. Pamplona, Ayuntamiento de Pamplona, 2007, pp. 21-35.