La intervención de Garrido resultó reveladora, ya que no solo ofreció una perspectiva sobre su trayectoria, sino que también presentó un enfoque en la gestión de personas que invita a reconsiderar los paradigmas tradicionales. A continuación, se exponen tres puntos clave que resumen lo más relevante de su exposición.

Liderazgo con esencia humana

En Alma Carraovejas, las personas no son vistas como un recurso, sino como el auténtico motor del negocio. Según Garrido, el CEO, Pedro Ruiz, promueve un liderazgo humanista que conecta profundamente con los valores y la esencia de cada persona dentro de la organización. Este enfoque, que fue decisivo para su decisión de unirse a la empresa, no solo impulsa el crecimiento personal de los empleados, sino que también fortalece su alineación con la misión de la organización. En palabras de Garrido: "No puede haber desarrollo profesional sin un desarrollo personal previo".

Compromiso no es lo mismo que satisfacción

Uno de los aspectos más innovadores del modelo de Alma Carraovejas es su enfoque sobre el compromiso de las personas. A través de una herramienta desarrollada por la startup española Datum, que se basa en teorías de motivación y comportamiento, miden no solo la satisfacción de los empleados —determinada por factores como el salario o las condiciones laborales— sino también su conexión emocional con el trabajo que realizan. Garrido enfatizó que lo que realmente impulsa a las personas es esa emoción de sentirse parte de algo más grande, y que esto marca una diferencia significativa en los resultados a largo plazo.

Un modelo de resultados con propósito

Finalmente, Alma Carraovejas no se limita a los indicadores tradicionales. Mientras muchas empresas se enfocan exclusivamente en los resultados económicos, ellos han adoptado una "quíntuple cuenta de resultados". Esta incluye, además de los resultados financieros, el impacto en las personas, el entorno social, el medio ambiente y un fuerte compromiso con la ética. Según Garrido, "cuidar de las personas y su crecimiento profesional es tan importante como cuidar la viabilidad económica". Este enfoque integral garantiza que cada decisión sea coherente con los valores de la compañía.

Al concluir la charla, quedó claro que Alma Carraovejas trasciende su condición de empresa vitivinícola para convertirse en una organización que cree en el poder transformador de las personas, construyendo un modelo de negocio donde los resultados se alinean con el desarrollo humano.