“La vulnerabilidad nos enseña que la clave en la vida no está en la elaboración de un superyó”
El profesor Javier de la Torre impartió una conferencia en la Universidad de Navarra sobre la antropología de la vulnerabilidad, con motivo de la presentación del último libro de los profesores Martín Montoya y José Manuel Giménez Amaya
“La vulnerabilidad nos enseña que la clave en la vida no está en la elaboración de un superyó, sino en estar abiertos y expuestos a los demás”. Así lo ha afirmado en la Universidad de Navarra Javier de la Torre, profesor de la Universidad Pontificia de Comillas. Sus palabras se enmarcan en la conferencia que impartió sobre la antropología de la vulnerabilidad, con motivo de la presentación del último libro de los investigadores del Grupo ‘Ciencia, Razón y Fe’, Martín Montoya y José Manuel Giménez Amaya, titulado Corporalidad, tecnología y deseo de salvación. Apuntes para una antropología de la vulnerabilidad.
A través de sus palabras, el profesor De la Torre analizó tanto el significado de vulnerabilidad como la grandeza de la vulnerabilidad en sí misma. Recordó que ésta tiene distintas dimensiones como la cultural, la social y sobre todo la antropológica, y que afecta a todas las personas, no sólo al que está enfermo en una cama.
Destacó que el ser humano es profundamente vulnerable “porque vivimos en un mundo crecientemente desigual, sin límites, obsesionado por el éxito y la desmesura e instalados en fragmentos que nos impiden pensar de forma crítica y buscar totalidades de sentido”.
Para De la Torre, la vulnerabilidad nos engrandece porque nos permite vivir en las emociones, en la cercanía corporal, en la compasión y en las entrañas, en la hospitalidad y en las relaciones y vínculos con los demás. Asimismo, afirmó que nos enseña a reconocer que, frente a una cultura de derechos, “los seres humanos estamos en deuda con todo lo recibido”, y que, aparte de ser igualitarios, “debemos saber estar abajo y arriba”.
“¿Qué futuro nos espera si nos libramos de la fragilidad?”
En la presentación de Corporalidad, tecnología y deseo de salvación. Apuntes para una antropología de la vulnerabilidad, publicado en la editorial Dykinson, intervino también Javier Bernácer, catedrático acreditado de Psicobiología, investigador del Instituto Cultura y Sociedad del centro académico y autor del prólogo.
Para Bernácer la publicación reúne tres ideas centrales: la primera de ellas, poner de manifiesto que “el ser humano es frágil y depende de otros” frente a la actitud de que es autónomo y que las relaciones entre personas son independientes. “En segundo lugar, los autores parten de lo que llaman la contingencia biológica, que sitúan en el envejecimiento, la enfermedad y en la muerte. Yo en el prólogo añado también la discapacidad porque, mientras las tres que proponen te las encuentras, la discapacidad congénita de una persona es constitutiva suya. Este es un matiz muy importante”.
La tercera idea se centra en la paradoja de la discapacidad, donde las personas que la ven desde fuera lo aprecian como una situación penosa que nadie querría vivir. “Sin embargo, quienes lo viven desde dentro lo ven como el mayor motivo de alegría. Ahí está la paradoja. Y la resolución de esta paradoja está en verlo desde la ética de la virtud. Uno cuando se encuentra con la discapacidad se da cuenta de que va desarrollando una serie de virtudes que le hacen mejor”. Para concluir, el profesor Bernácer hizo hincapié en la importancia de pensar hacia dónde va una sociedad que barre la discapacidad y por tanto oculta las virtudes: “¿Qué futuro nos espera si nos libramos de la fragilidad?”.