“El futuro del Derecho africano pasa por el desarrollo de un sistema propio, sin forzar una especie de occidentalización”
"El futuro del Derecho africano pasa por el desarrollo de un sistema propio, sin forzar una especie de occidentalización"
La tesis defendida por Luis G. Franceschi ahonda en las consecuencias jurídicas derivadas de la Carta Africana de los Derechos Humanos
"El futuro del Derecho africano pasa por el desarrollo de un sistema propio, sin forzar una especie de occidentalización". Así lo afirma Luis G. Franceschi en su tesis The African Human Rights Judicial System: a proposal for streamlining structures and domestication mechanisms viewed from the foreign affairs power perspective. Desde una perspectiva africana, el trabajo analiza las consecuencias jurídicas derivadas de la Carta Africana de los Derechos Humanos.
Según Franceschi, "es necesario hacer una auditoría constitucional en la que se examine cómo los países africanos regulan sus asuntos exteriores. De ella resultará cuán eficiente es en cada estado la incorporación del Derecho Internacional, algo fundamental a la hora de incorporar y ejecutar las sentencias internacionales en materia de derechos humanos".
Actualmente, en África existe una Corte de los Derechos Humanos y de los Pueblos, aunque se ha propuesto una fusión con la aún inexistente Corte Africana de Justicia. El protocolo de fusión propone formar una única institución, que habrá de llamarse Corte Africana de Justicia y de los Derechos Humanos. Para el autor, el problema radica en que ésta "no presenta soluciones claras para la ejecución de sentencias internacionales, lo que supone un problema serio para evitar futuros conflictos en África, donde reina una especie de impunidad judicial que hace que sólo un 12% de las decisiones internacionales sean ejecutadas".
Según Franceschi, la fusión está "bien fundamentada" aunque, a su juicio, "el protocolo de fusión debería proponer la vía de absorción y no la de sustitución. Es decir, la nueva corte fusionada habría de absorber a la corte existente, pero nunca sustituirla, como está previsto en el protocolo de fusión, pues dicha sustitución significaría empezar de nuevo, perdiendo toda la tradición y memoria institucional, mientras que la absorción protegería la memoria y la tradición de la corte ya existente". La tesis también sugiere, entre otras, una ampliación de la jurisdicción africana que facilite el acceso individual a la justicia.
Por último, el trabajo de Franceschi advierte de la importancia de que las consecuencias económicas y financieras de la fusión "sean tomadas en cuenta" para así garantizar la sostenibilidad e independencia de la corte.