El mecanismo de Anticitera: un innovador ‘planetario portátil' del año 150 a.C.
Un investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina expuso en un seminario del Grupo de Investigación 'Ciencia, Razón y Fe' los misterios de este artilugio
A principios del siglo pasado, un equipo de buceadores encontró por casualidad un complejo mecanismo en las costas de Anticitera (Grecia), a más de 40 metros de profundidad.
Las investigaciones que se han realizado en los últimos 100 años no han conseguido desvelar por completo el misterio que encierra este artilugio, pero sí han constatado que se trata de un instrumento que revela una tecnología avanzadísima para lo que se cree que se conocía en su época: no se tienen referencias de aparatos similares hasta el siglo XVI.
Christián Carlos Carman, investigador adjunto del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) de Argentina y de la Universidad Nacional de Quilmes, presentó en la Universidad de Navarra los principales descubrimientos que se han hecho en torno al mecanismo, con motivo de un seminario organizado por el Grupo de Investigación ‘Ciencia, Razón y Fe'.
El experto repasó las principales aportaciones de los trabajos de Derek de Solla Price, Michael Wright y del equipo liderado por Tony Freeth y Mike Edmunds, que han arrojado luz sobre las principales funciones del mecanismo y han permitido descifrar las inscripciones en griego que se encuentran en la parte posterior.
Se cree que el artilugio poseía más de 30 engranajes y, mediante distintos punteros, mostraba la posición exacta del sol y de la luna en el zodíaco, el día del año, puede que también la posición de los planetas, los meses y horas a las que se produciría un eclipse (así como de qué tipo era y si sería visible o no), cómo corregir por 8 horas la predicción de eclipses en un ciclo de 54 años, el mes del calendario luni-solar (indicaba qué años tenían 13 meses y cuáles 12, qué meses tenían 29 días y cuáles 30 y qué día debía ser omitido)… Todo ello, con gran precisión.
Como anécdota, también cabe señalar que indicaba cuándo se iban a celebrar los juegos de Olimplia y Nemea, "lo que demuestra una gran relación entre ciencia y sociedad en esa época", detalla el profesor Carman.
¿Quién pudo ser el autor de esta sofisticada ‘computadora' primitiva? Según explicó Christián Carlos Carman, una de las hipótesis que se baraja es que fuese el propio Arquímedes quien lo realizó, o bien quien sentó las bases para que se desarrollaran este tipo de mecanismos. "Sabemos que escribió una obra sobre cómo hacer instrumentos así, que mostrasen la posición del sol y la luna", apuntó. "Asimismo, en De Republica, de Cicerón, se describe una herramienta muy similar a ésta, que se le atribuye a él".
Para el investigador, se trata de una "revolución en la historia de la tecnología" y en la historia de la ciencia, que hace "replantearse la visión que se tiene de los antiguos griegos. Ellos afirmaban tener un calendario, pero nosotros nunca lo creímos: el mecanismo de Anticitera es una prueba de que ellos tenían razón".
"También es interesante por lo que nos puede hablar acerca del realismo y del instrumentalismo en la antigüedad: según algunas corrientes, la astronomía para los griegos era un mero instrumento de cálculo, pero sin ninguna pretensión de estar describiendo la realidad tal cual es. Después hubo otra corriente muy fuerte que mostraba que muchos astrónomos de la época eran realistas", añadió.