“La tecnología actual está en los límites de la granularidad atómica, más allá no se puede ir”, así lo aseguró en la Universidad de Navarra el físico Bernabé Linares-Barranco, director del Instituto de Microelectrónica de Sevilla, con motivo de su participación en el seminario de noviembre del Grupo ‘Ciencia Razón y fe’.

La sesión estuvo centrada en la “Computación Neuromórfica y Nanotecnologías: ¿Hasta dónde podría llegar la inteligencia Artificial?”. Para poner en contexto su afirmación sobre el límite atómico de la tecnología, recordó que actualmente hay un chip que está en muchas tabletas y móviles del mercado, el Kirin de HiSillicon, “que está hecho en siete nanómetros, mide menos de un centímetro cuadrado, tiene casi siete mil millones de transistores y es para hacer procesamiento de imágenes”.

Destacó que estamos presenciando un nuevo resurgir de la inteligencia artificial, término usado por primera vez en 1956, motivado por la combinación de conocimientos en neurociencia biológica, neurociencia computacional, y la disponibilidad de mejores recursos computacionales gracias a los avances en nanotecnologías.

A lo largo de la sesión comentó cómo se pueden combinar conocimientos de neurociencia con nuevas técnicas de nanotecnologías para construir sistemas físicos que "sensan" y computan imitando al cerebro, en particular el sistema de visión.

Explicó que procesar imágenes computacionalmente es muy costoso porque hay mucha información en cada una de ellas, sin embargo, las “retinas” para cámaras que investiga el Instituto Microelectrónica, a la par con otras dos spin off que las comercializan, lo hacen mediante el reconocimiento del movimiento. El proceso de identificación es mucho más rápido, “impulso a impulso”, asemejándose al proceso que realiza el ojo humano cuando percibe una realidad.

Destacó que esta línea de investigación, denominada por muchos como ‘ingeniería neuromórfica o ‘computación neuromórfica’ “se encuadra como una pequeña pero prometedora parcela dentro de la corriente actual del nuevo resurgir de la Inteligencia Artificial”.

Chips con capacidad de funcionar como las neuronas del cerebro humano

Antes de concluir la sesión, planteó si en algún momento la nanotecnología podrá superar la capacidad del cerebro humano, y afirmó que actualmente los chips casi alcanzan el funcionamiento de las neuronas del cerebro. “Otra cosa es entrenarlos para que hagan lo mismo”, dijo.

Además, aunque asegura que hay científicos que no coinciden con él, se muestra poco optimista sobre la posibilidad de que “una máquina vaya a saber que tiene un yo dentro como el ser humano”.

Bernabé Linares-Barranco es licenciado en Física Electrónica por la Universidad de Sevilla y doctor por la misma universidad y por la Universidad de Texas A&M. Ha sido profesor visitante en la Universidad Johns Hopkins y en la Universidad de Texas A&M. Actualmente es director del Instituto de Microelectrónica, un centro mixto de la Universidad de Sevilla y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas.