Los museos navarros, una oportunidad educativa
Una tesis defendida en la Facultad de Educación y Psicología aborda el papel de la educación en los Museos de arte contemporáneo en Navarra
“Las inversión económica, las mejoras tecnológicas y la formación de los educadores son claves para mejorar la competitividad de los Museos de arte contemporáneo en Navarra”, asegura Ignacio Perlado. El autor de la tesis “La educación en los museos de arte contemporáneo de Navarra”, estudió durante los últimos cuatro años la actividad educativa de cinco museos que contienen obras de arte contemporáneo en Navarra, como son, el Museo Oteiza, de Alzuza, el Museo de Navarra y el Museo Universidad de Navarra, ambos en Pamplona, el Museo Gustavo de Maeztu de Estella y el Museo de Arte Moderno Muñoz Sola, de Tudela. Su objetivo era comprobar si estos museos, además de ser entidades responsables de la conservación de la obras, tienen también como misión principal la educación. Para ello, entrevistó a los responsables de didáctica y educación de cada museo y concluyó que la educación está realmente presente en el día a día de los museos, ya que cuentan con actividades educativas y con personas responsables de las mismas.
En este trabajo, en el que confluyen el patrimonio, la educación y el arte, se aborda la necesidad de mejorar la calidad de las herramientas tecnológicas para ser competitivos y ajustarse a las demandas y a la mentalidad de los ciudadanos del siglo XXI.
En la investigación se cuestiona si el museo se puede considerar un espacio educativo y qué medios se emplean para suscitar el aprendizaje. Para contestar a este interrogante elaboró un listado de preguntas que, mediante una entrevista, formuló a los responsables del área educativa de cada centro museístico. El análisis de la información recogida, una vez terminada la fase de investigación, permitió obtener unos resultados y realizar una propuesta a los museos de los puntos fuertes y los aspectos de mejora de cada uno, como pueden ser la inversión económica en la educación y la formación permanente de los educadores que se dediquen exclusivamente a ello o la necesidad de mejorar la calidad de las herramientas tecnológicas. “Espero que estas conclusiones del trabajo contribuyan a futuras investigaciones y que las ideas expuestas sirvan para asentar la misión educativa en los museos y confirmar que el futuro de los museos depende en buena medida de su planteamiento educativo”, señaló el doctor.