Recientemente se ha celebrado en L´Hospitalet de Llobregat (Barcelona) el Congreso de Microbiología de la Sociedad Española de Microbiología (SEM), al que ha asistido el profesor y decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Navarra, Ignacio López-Goñi. Junto con el Dr. Manuel Sánchez, profesor de la Universidad Miguel Hernández, López-Goñi organizó el simposio "Microbiología y periodismo: una relación simbiótica", celebrado en el marco del congreso.

Cristina Ribas, presidenta de la Asociación Catalana de Comunicación Científica (ACCC), fue una de las invitadas, así como José Antonio López Guerrero, profesor de la Universidad Autónoma de Madrid y director de Cultura Científica del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa (CBMSO) y Mercè Piqueras, escritora y editora científica de International Microbiology.

En el transcurso del mismo, se incidió en que la ciencia debe estar al servicio de las personas, "capacitarlas para cambiar el mundo". En opinión de Ribas "el diseño de la investigación debe incluir la opinión de los ciudadanos". Asimismo, se presentaron iniciativas como patientslikeme, un portal web que pone en contacto pacientes, profesionales de la salud y laboratorios, y que ha iniciado determinados ensayos clínicos que interesaban a los propios pacientes.

España a la cola de Europa
Por su parte, López Guerrero se refirió a los datos de la FECYT que sitúan a España a la cola de Europa en nivel cultural científico: "los médicos y los científicos son los profesionales más valorados, y a la gente -además del fútbol- le interesan los temas de medicina y salud, energía y medio ambiente". Para este divulgador "si los científicos no actuamos, la pseudociencia  llenará el espacio que deja la ciencia", y pidió también que se evalúe la actividad divulgativa del científico. 

En la misma línea,  se desarrolló el debate sobre ¿Quién debe comunicar?. Piqueras lamentó que "en las carreras de ciencias no se estimula para la comunicación, no se enseña a comunicar. Todo se puede divulgar, pero hay que saber hacerlo, sin aburrir y manteniendo el rigor". La experta animó a que los científicos que puedan y sepan hacerlo dediquen parte de su tiempo a la comunicación y divulgación. También recordó que "algunos de los errores en prensa, salen de los propios gabinetes de comunicación, lo que inhibe a muchos investigadores y científicos a colaborar con ellos".

Para el profesor López-Goñi, "los investigadores tenemos que seguir esforzándonos en comunicar y divulgar nuestra actividad ya que es un deber de justicia con la sociedad. Aunar esfuerzos entre el mundo de la ciencia y la comunicación sigue siendo una tarea pendiente también en nuestra Universidad".