Termina la parte presencial del Máster de Matrimonio y Familia curso 22-23
El máster destaca la necesidad de fortalecer los vínculos familiares en la actual sociedad individualista
05 | 06 | 2023
El pasado 15 de junio se puso fin a las dos semanas de clases presenciales del curso 2022‐2023, que inició el 5 de junio. Durante esas dos semanas, el alumnado de primero y de segundo curso del Máster de Matrimonio y Familia, disfrutó en el Campus de Pamplona de la Universidad de Navarra de un programa que profundizó en la temática del fortalecimiento de los vínculos en la familia. Se buscaba que las sesiones aportaran nuevas luces, conocimientos y herramientas para afrontar, personal y profesionalmente, los retos actuales a los que se enfrenta las familias hoy en día para fortalecer estos vínculos.
Más de 30 ponentes de reconocido prestigio y valía en su área profesional, que trabajan en el fortalecimiento de los vínculos, profundizaron en esta cuestión desde tres miradas integradoras (la personal, la diádica y la comunitaria) y desde diversas metodologías, como las conferencias, los debates, las tertulias, las mesas redondas, los casos prácticos, las pláticas o la visualización de videos. El carácter multidisciplinar que tienen los estudios en el Máster de Matrimonio y Familia y el presencial particularmente, la temática del fortalecimiento de los vínculos en la familia buscó relacionar la teoría con la práctica para responder a las demandas sociales de su alrededor. Se plantearon sesiones paralelas para el alumnado de primero y para el de segundo, engarzadas con encuentros comunes de ambos grupos, pensados para formar en el fortalecimiento de los vínculos en asuntos de especial relevancia social. Por esta razón, el alumnado fue testigo de la combinación armónica del contenido abordado desde distintas disciplinas académicas, como la educación, la medicina, la arquitectura, la filosofía, la psicología, la teología, el derecho, la ética, o la comunicación.
A través de la asistencia a las clases y de la convivencia intensa con colegas de promoción, el alumnado disfrutó extraordinariamente durante el presencial del ambiente académico, de las instalaciones del campus de Pamplona y de los servicios que ofrece la Universidad de Navarra. Se compartió un tiempo y un espacio únicos, que fomentaron un auténtico sentido de pertenencia al grupo y a los estudios, se intensificaron aún más las relaciones personales forjadas durante el curso, y se fortalecieron los vínculos entre profesorado y alumnado.