“La empresa familiar puede ser un arma de doble filo”, afirmó Antonio Lence, director general de Viena Capellanes, que compartió su experiencia como directivo de la compañía familiar con 144 años de historia. Sin embargo, la clave del éxito del negocio familiar, afirma Lence, está en las personas: “nuestro proyecto se ha mantenido adelante gracias a las personas”. El papel del trabajo en equipo, añadió Lence, es una cuestión “importantísima en cualquier empresa” y “muy difícil de aprender”, como componente inseparable a las personas.

En la quinta generación del negocio familiar, Antonio Lence, director general de la empresa, mostró a los alumnos del Máster en Dirección de Personas en las Organizaciones, el desarrollo de una panadería que nació en la calle Capellanes de Madrid siguiendo una receta vienesa para elaborar un pan al que se le llamó “viena” a un negocio que hoy tiene 20 establecimientos y 55 corners, entre otros. “Intentamos evitar que la historia se convierta en un lastre. Nos sentimos orgullosos de nuestra historia, pero no queremos que nos encasillen en una determinada actividad. Con el tiempo nos hemos ido diversificando y desarrollando actividades. La empresa ahora hace todo el proceso: fabrica, almacena, distribuye y vende”.

Asimismo, Lence compartió algunos consejos para dirigir personas en una compañía: “Es muy importante valorar a la persona no como una función o un puesto, sino reconociendo que son personas antes que trabajadores o directivos. Hay que buscar la forma de unirlas creando nuevos equipos y que todos vayan hacia el mismo objetivo”. Lence destacó que “las personas no son recursos sino que están llenas de recursos”, por ello las mejores empresas desarrollan grandes personas y esas personas son las que permiten ofrecer buenos productos y servicios.

A nivel personal, Lence destacó la importancia de no mostrar resistencia al cambio y de mantener una actitud positiva ante el trabajo. “Aprovechad todas las oportunidades que tenéis de aprender. Lo más importante es la actitud. La actitud no suma, multiplica”.