“Una lechuga o un tomate micorrizado aprovechan el agua el doble e incluso el triple que una planta normal”
La Facultad de Ciencias acoge el XIII Simposio hispano-portugués de relaciones hídricas en la plantas
FOTO: Manuel Castells
Según asegura Ricardo Aroca, investigador del CSIC en la Estación Experimental de Zaidín (Granada), una planta hortícola, como la lechuga o el tomate “puede multiplicar por dos, e incluso por tres, su aprovechamiento del agua respecto a una planta a la que no se le haya inoculado este hongo”. Así lo declaró este experto en la Universidad de Navarra con motivo del XIII Simposio hispano-portugués de relaciones hídricas en las plantas, en el que participan 35 científicos de ambos países.
El equipo de investigación de Ricardo Aroca, graduado en Biología por la Universidad de Navarra, se centra en cultivos hortícolas -tomate, lechuga, alubia- y también en maíz y olivo. “En estas plantas estudiamos cómo los hongos micorrícicos -hongos que para vivir lo hacen asociados a las raíces de algunas plantas- pueden aumentar la tolerancia al estrés por sequía o por salinidad. Y de hecho, lo que observamos es que esta asociación funciona: las plantas a las que inoculamos estos hongos absorben mejor el agua y los nutrientes. En particular, el fósforo, además de generar otros efectos positivos en los cultivos”, explica el experto.
Esa mejora en el aprovechamiento de los recursos por parte de las plantas puede resultar vital para la agricultura de países y regiones con carencia de agua: “Los hongos micorrícicos se están utilizando ya en el campo y van a ser claves en países como España. El problema es cómo lograr que permanezcan en el suelo, ya que allí compiten con otros hongos ya establecidos, por eso trabajamos para encontrar los hongos que mejor se adapten a cada cultivo y a las características de cada suelo”.
Premio a la Investigación para Timac AgroSobre el futuro de la agricultura, el experto del CSIC subraya las mejoras que ya se han hecho en el uso del agua, “con riego solo donde y cuando hace falta”, tendiendo a una agricultura “de precisión”, con sistemas de teledetección para optimizar recursos hídricos, etc. No obstante, añadió que lo lógico sigue siendo “usar en cada lugar aquellos cultivos más adaptados a esas condiciones. E intentar que, con una menor cantidad de recursos (agua y fertilizantes), produzcamos lo mismo, o menos, pero de mejor calidad”.
En el contexto del simposio hispano-luso la empresa Timac Agro entregó el IX Premio Ibérico de Investigación en Relaciones Hídricas, otorgado por la contribución de los galardonados a la mejora en el conocimiento de este campo.