El ex político y hoy hombre de negocios Rafael Arias-Salgado aseguró en la Facultad de Económicas que "todos los países con instituciones estables han podido demostrar que las crisis se canalizan y digieren bien; lo peor es ponerlas en cuestión en tiempos de crisis".

Arias-Salgado lanzó un mensaje de estabilidad y confianza en España en contraste con la coyuntura económica adversa, y recordó que si atiende a la realidad social y cultural "España es un milagro histórico". Con la experiencia histórica que le permite haber ocupado distintos ministerios en los primeros gobiernos de la democracia, explicó que nuestro país es "similar" a otros europeos, y definió al Viejo Continente como un "melting pot" (expresión inglesa que puede traducirse como crisol de razas, y que hace referencia a la homogeneización de poblaciones a partir de una situación más heterogénea).

El también ministro con el Partido Popular de José María Aznar, que formó parte e impulsó la todavía hoy reivindicada Transición, destacó que España es un país que se distingue por su "singularidad y diversidad más allá de los nacionalismos", en su opinión es una cuestión de "idiosincrasia".

Y aunque reconoció "ciertos desajustes" en el funcionamiento del Estado de las Autonomías, recalcó el progreso político, económico y cultural que puede apreciarse en nuestro país echando la vista atrás tres décadas.

Defendió el Estado fuertemente descentralizado que recoge la Constitución Española, y aunque reconoció que se parece "como un huevo a otro huevo" a un estado federal, matizó que "en su concepción clásica, el estado federal es una unión de soberanías originarias, y por eso no se aceptó en España".

A preguntas de los estudiantes, Arias-Salgado defendió las listas abiertas y desbloqueadas –"por supuesto"-, pero también recordó que el sistema electoral "debe garantizar la representatividad de las minorías, pero también la gobernabilidad, para lo que es necesaria la formación de gobiernos fuertes".

La experiencia de Arias-Salgado sirvió a los alumnos para trazarse un "mapa conceptual" de España que a su juicio oscila en tres grandes aspectos: "Estado de Derecho y democracia representativa, Estado social y de bienestar y economía de mercado y libertad crítica y método empírico".

Al futuro laboral de este país les recordó que las empresas les van a pedir "capacidad para situar problemas concretos en un contexto para alcanzar su completa significación, porque los problemas nunca aparecen aislados, sino siempre en un entorno". Y aunque aseguró que toda su conferencia era opinable y animó a los jóvenes a que discutieran con él, aseguró que su trabajo en el futuro será "comprender problemas e insertarlos en contextos cada vez más amplios".