“La función pública no es una tarea sencilla”, aseguró la exvicepresidenta del Gobierno de Navarra, Lourdes Goicoechea, el pasado viernes, 19 de enero, durante una sesión del ciclo de coloquios del Máster de Gobierno y Cultura de las Organizaciones del Instituto Empresa y Humanismo de la Universidad de Navarra.

Asimismo, recalcó que el funcionario debe saber lidiar con los riesgos que el trabajo conlleva: la imagen personal, que no siempre se muestra positiva; los medios de comunicación, cuya libre opinión se halla sujeta a una ideología propia; el peligro de separarse de la realidad; y perder de vista el objetivo planteado.

La exvicepresidenta subrayó la importancia de considerar la responsabilidad en el cumplimiento de un cargo público, asunto que fue abarcado desde varios frentes. Para la consecución de esta obligación, asegura Goicoechea, la función pública debe estar regida por lineamientos de equidad y justicia. De allí que se exigen los más altos estándares éticos, de responsabilidad y de compromiso, por parte de aquellos que comportan el poder estatal.

De este modo, Goicoechea apunta algunas sugerencias que considera son el legado de su mandato: “recordar todas las mañanas el objetivo propuesto, no gastar más de lo que ingresa, y, sobre todo, cumplir todos los compromisos que se adquieren sin perder de vista la responsabilidad que se tiene sobre lo que se hace”.