Corella, un ayuntamiento en ampliación

El edificio que acoge al ayuntamiento fue construido en el siglo XVII y sustituyó a la vieja casa consistorial situada en la calle Conejera, debido a la importancia que la entonces plaza del Mercado y plaza de la Verdura estaban ganando frente a la antigua casa medieval erigida en torno a un castillo hoy día desaparecido.

En el año 1560 se adjudicaron a Domingo de Peñarreta, mediante subasta, unas obras presupuestadas en 625 ducados para derribar la antigua casa consistorial y construir una nueva en el mismo lugar; obras no llegaron llevarse a cabo. En 1576 se tasaron unos terrenos en la actual plaza de los Fueros para la construcción de la mencionada casa, aunque no está claro si el edificio actual, finalmente ubicado en la plaza de España, fue construido específicamente para albergar el Ayuntamiento o si tenía un uso distinto antes de ser destinado a funciones gubernamentales.

A lo largo de su historia, el edificio ha sido objeto de varias remodelaciones. En 1700, el albañil Juan de Argós tuvo que renovar la sala principal, reparar los asientos de madera, asegurar el archivo en un mueble de madera y reconstruir las cubiertas debido a los daños causados por un incendio. Por su parte, en 1738 se eliminó el cielo raso de un mirador en mal estado, se abrió una puerta y se añadió una escalera. Además, a mediados del mismo siglo, los albañiles Manuel Gómez y Juan Antonio Garbayo, junto con el carpintero Miguel Ángel de Arrieta, llevaron a cabo algunas obras menores.

A comienzos de la década de los 80 del siglo XX el edificio experimentó una transformación estética hacia el barroco, siguiendo el proyecto de los arquitectos César Sesma Bienzobas y Francisco Bellido Núñez. Se introdujeron marcos de ladrillo en los vanos, se fusionaron los tres balcones preexistentes en el primer piso, entre los cuales se encuentran dos escudos que representan la heráldica medieval de la ciudad, un águila en actitud de atrapar a un conejo en fuga. Además, se agregaron voladizos a los balcones del segundo piso y se reemplazaron las antiguas ventanas por óculos en el último nivel.

Recientemente el Ayuntamiento de Corella ha adquirido el palacio de los Alonso, ubicado a la mencionada casa, para destinarlo a una ampliación de las instalaciones administrativas municipales y, al mismo tiempo, para proteger y recuperar el patrimonio histórico artístico de la ciudad. Después de la rehabilitación, ambas edificaciones formarán una unidad estructural, destinándose la planta baja a la atención al público.